/ lunes 10 de diciembre de 2018

Charla productiva con don Xavier Rivas

VIENTOS

Un día, terminados los dramáticos episodios de la Revolución Mexicana, los vencedores encabezados por don Venustiano Carranza, un grupo de hombres cuyas ropas olían todavía a pólvora, acentuaron su voz en la palabra escrita en lo que llamarían, concretamente, Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.

Ahí quedaría la esencia del pensamiento de Morelos, de Juárez, de Madero, de Lázaro Cárdenas y de todos aquellos que forjaron nuestra historia positiva pre y post revolucionaria y desde la Independencia. Claro, la dinámica económica del mundo fue, paulatinamente, cambiando los esquemas previos y los mexicanos no podíamos quedarnos fuera del concurso y sobre eso fincamos la nueva historia y, quizá, el inédito futuro sea halagador. Pero ¿en qué momento nos equivocamos y desviamos el rumbo que nos marcaron, moral, ético y de progreso?

Esto fue la temática de una charla muy intensa entre este escribidor y don Francisco Xavier Rivas Martínez, un gran elemento distinguido por su entrega al desarrollo económico local, regional, nacional e internacional, que además no se pierde en los recovecos entelarañados de temas que no coinciden con el progreso real, que nos dejó un grato sabor. Rivas Martínez no solo conoce -y bien- la historia nuestra: es un avezado elemento para tomarlo en el futuro por los gobiernos empeñados hoy en salir a flote en estos momentos en donde pareciera casi un reto imposible, lograr nuestro desarrollo económico y el abatimiento, como consecuencia, de estos momentos violentos que vivimos, que nos atosigan y enriquecen la impunidad.

No tengo idea de quiénes vayan a tomar los mandos en el año electoral 2019. Supongo que el espíritu contestatario de la sociedad que siente haber sufrido los gobiernos precedentes, sigan su marcha hacia delante en lo político en cuanto a las decisiones del pueblo, y en lo económico a manos de los cambios cuya pretensión progresista son evidentes. Es aquí en donde me detuve, con Xavier en esa rica charla, imaginando que quien es hoy vicepresidente de PIM, S.A., podría ser un positivo candidato a cargos de elección popular o de niveles de función en el desarrollo económico del Estado. Hice un tanteo. No hubo respuesta. Es modesto, eso lo sé. Pero no es tiempo de elusiones ni de ilusiones. Hay que escoger a los mejores elementos, preparados, capaces en su tarea y honestos. HONESTOS que es el diamante de los valores. Y que me dispense Xavier si lo hago público. Es necesario escoger con tino a quienes sirven y quieren a su patria chica. ¿No lo cree usted así?

jaimepardover@yahoo.com

VIENTOS

Un día, terminados los dramáticos episodios de la Revolución Mexicana, los vencedores encabezados por don Venustiano Carranza, un grupo de hombres cuyas ropas olían todavía a pólvora, acentuaron su voz en la palabra escrita en lo que llamarían, concretamente, Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.

Ahí quedaría la esencia del pensamiento de Morelos, de Juárez, de Madero, de Lázaro Cárdenas y de todos aquellos que forjaron nuestra historia positiva pre y post revolucionaria y desde la Independencia. Claro, la dinámica económica del mundo fue, paulatinamente, cambiando los esquemas previos y los mexicanos no podíamos quedarnos fuera del concurso y sobre eso fincamos la nueva historia y, quizá, el inédito futuro sea halagador. Pero ¿en qué momento nos equivocamos y desviamos el rumbo que nos marcaron, moral, ético y de progreso?

Esto fue la temática de una charla muy intensa entre este escribidor y don Francisco Xavier Rivas Martínez, un gran elemento distinguido por su entrega al desarrollo económico local, regional, nacional e internacional, que además no se pierde en los recovecos entelarañados de temas que no coinciden con el progreso real, que nos dejó un grato sabor. Rivas Martínez no solo conoce -y bien- la historia nuestra: es un avezado elemento para tomarlo en el futuro por los gobiernos empeñados hoy en salir a flote en estos momentos en donde pareciera casi un reto imposible, lograr nuestro desarrollo económico y el abatimiento, como consecuencia, de estos momentos violentos que vivimos, que nos atosigan y enriquecen la impunidad.

No tengo idea de quiénes vayan a tomar los mandos en el año electoral 2019. Supongo que el espíritu contestatario de la sociedad que siente haber sufrido los gobiernos precedentes, sigan su marcha hacia delante en lo político en cuanto a las decisiones del pueblo, y en lo económico a manos de los cambios cuya pretensión progresista son evidentes. Es aquí en donde me detuve, con Xavier en esa rica charla, imaginando que quien es hoy vicepresidente de PIM, S.A., podría ser un positivo candidato a cargos de elección popular o de niveles de función en el desarrollo económico del Estado. Hice un tanteo. No hubo respuesta. Es modesto, eso lo sé. Pero no es tiempo de elusiones ni de ilusiones. Hay que escoger a los mejores elementos, preparados, capaces en su tarea y honestos. HONESTOS que es el diamante de los valores. Y que me dispense Xavier si lo hago público. Es necesario escoger con tino a quienes sirven y quieren a su patria chica. ¿No lo cree usted así?

jaimepardover@yahoo.com