ENTRE TECLAS
La rickettsia, uno de los problemas de salud pública más graves que se han vivido en Mexicali en los últimos años, misma que “brotó” en la zona poniente de Mexicali allá por 2009.
Desde luego que lo más grave que nos ha tocado vivir a los cachanillas es la pandemia del coronavirus, que ha dejado profundo dolor a miles de familias.
Sin embargo, la rickettsia no podemos ignorarla. La rickettsiosis transmitida por garrapatas es un conjunto de enfermedades, cuya incidencia transcurre paralela al desarrollo del ciclo de vida de las garrapatas.
La lesión fundamental que provoca es una vasculitis y la clínica consiste en fiebre y exantema, así como en una lesión típica debida a la picadura del insecto, además de otras manifestaciones generales e inespecíficas. El diagnóstico se basa en cultivos celulares y en pruebas serológicas, especialmente la inmunofluorescencia indirecta. El tratamiento se realiza con tetraciclinas y cloramfenicol, aunque con ciertas precauciones en niños de corta edad. La profilaxis se basa en el control de los vectores y evitar la exposición.
Desde 2009 a la fecha en Baja California, la rickettsia ha causado más de 162 muertes, de las cuales la inmensa mayoría han sido en Mexicali. Desde que la enfermedad detonó en las colonias de la zona poniente de Mexicali han pasado cinco gobiernos municipales, incluido el actual que encabeza Marina del Pilar Ávila Olmeda, sin que nada se haya logrado para darle una efectiva protección a la población cachanilla.
Los principales factores de riesgo siguen siendo la presencia de patios de tierra, casas hechas de materiales mixtos y otro tipo de situaciones como la falta de cerco alrededor de los patios y la presencia de perros con garrapatas dentro de los domicilios.
La rickettsiosis es una enfermedad que aparece como fantasma de entre la suciedad. La Secretaria de Salud ha emitido comunicados de prensa en el que establece que el gobierno estatal redoblará esfuerzos para erradicar este problema de salud pública. El Isesalud, en coordinación con las dependencias federales como el Centro Nacional de Prevención y Control de Enfermedades (CENAPRECE) y el Centro Nacional de Servicios de Constatación en Salud Animal-Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (CENAPA-SENASICA), realiza un proyecto de investigación taxonómica y de patógenos del vector.
Esta actividad se está llevando a cabo en los sitios donde se presentaron casos de rickettsiosis y en lugares clave donde hay presencia de garrapata, en Mexicali, Tijuana, Ensenada y Vicente Guerrero. La mejor medida preventiva es evitar las regiones infestadas de garrapatas. Si se viaja a una zona de riesgo es necesario utilizar ropa protectora y repelentes contra insectos y garrapatas, aplicados tanto a la ropa como a las partes expuestas del cuerpo.
Las personas en riesgo deben examinarse minuciosamente el cuerpo, el de sus hijos y sus animales domésticos en busca de garrapatas después de haber permanecido al aire libre durante la temporada de garrapatas y eliminarlas inmediatamente si las encuentran.
