/ domingo 3 de octubre de 2021

El reencuentro de Pánfilo y Prisciliano

La Espiga


Los dos añejos militantes político-partidarios Pánfilo y Prisciliano volvieron a encontrarse. Su posición privilegiada en la Vieja Guardia de los partidos políticos PAN-PRI, que controlaron la administración gubernamental de BC por muchos-muchos años, les permitió dialogar sin mayores incidentes.

En aquellos tiempos de esplendor se decía: “Baja California es obra de la Revolución” y con esta consigna los cachorros revolucionarios se repartían el pastel entonces llamado El Carro Completo, o sea, todas las regidurías, diputaciones, presidencias municipales y gubernaturas quedaban en manos de los fieles seguidores del “Sufragio efectivo-con reelección”.

En 1989 llegaron los blanquiazules al poder y lo agarraron muy bien. Por 30 años nuevas familias y grupos políticos ejercieron las funciones gubernamentales, todo iba más o menos bien hasta que llegó “El Güero de Rancho” Mr. Kiko Vega y babalú las tortas: Las finanzas de la administración central se descuadraron y ya no hubo recursos para cubrir los numerosos adeudos vencidos.

-Pánfilo: Nuestro error fue darle el carro completo a Kiko. Sabiendo que el lenguaje es el espejo del alma, nos lastimaban sus declaraciones espontáneas; la bronca fue que -al parecer- no se le pudieron sacar mayores recursos presupuestales al presi Peña Nieto…

-Prisciliano: Peña Nieto era un gran estadista, solo que su formación ideológica a veces fallaba, había que hacer buenas negociaciones con los vecinos americanos mientras las fuerzas políticas de la oposición se empeñaban en bloquear los acuerdos cupulares por el bien de la patria…



-Pánfilo: Kiko sí le sabía a la administración de los recursos públicos, la cosa fue que bajaron los precios del crudo mexicano y ni modo manito, nuestro partido quedó desprotegido. Sin la actualización requerida para los nuevos tiempos de la globalización comercial, nuestras antiguas tesis basadas en el humanismo político quedaron rebasadas por la mercadotecnia de las redes sociales…

-Prisciliano: A nosotros nos faltó cálculo político, hicieron falta los nuevos cuadros de jóvenes conectados a las redes digitales, las masas empobrecidas crecieron al ritmo impuesto por el neoliberalismo y ya no votaron por nosotros, ya no hubo de piña, solo discursos vacíos sin sustento en la realidad…

-Pánfilo: A los pripanistas solo nos quedó unirnos para tratar de ofrecer algo novedoso en el mercado político-electoral, había que enfrentar muchos problemas sociales con pocos recursos económicos. Para B.C. los requerimientos de la gobernanza democrática nos desbordaron, la fórmula pripanista-perredista sufrió una derrota mayor y ya ni como alegarle al ampayer…

-Prisciliano: A nivel regional y local invitar a los del PRD complicó las cosas, derecha, centro e izquierda coaligados crearon una ensalada agridulce que no apeteció a los electores de BC.

El pripanismo unido sí pudo ser vencido y, ni hablar, solo un cambio de mentalidad nos puede ayudar para las próximas elecciones…

-Pánfilo: El pripanismo debe abandonar la mediocridad y arrogancia de los viejos tiempos, ahora se requiere de imaginación sociológica (para citar al clásico) todavía se le puede sacar agua al bule, debemos apoyar a los empresarios en sus negocios, pero a la actividad gubernamental solo deben llegar personas con mística social…

-Prisciliano: Perdón, pero ese concepto es nuestro, qué tal si pensamos en sacar a las mayorías populares de la pobreza, sin demagogia, sin poses falsas, sin memes absurdos…

La Espiga


Los dos añejos militantes político-partidarios Pánfilo y Prisciliano volvieron a encontrarse. Su posición privilegiada en la Vieja Guardia de los partidos políticos PAN-PRI, que controlaron la administración gubernamental de BC por muchos-muchos años, les permitió dialogar sin mayores incidentes.

En aquellos tiempos de esplendor se decía: “Baja California es obra de la Revolución” y con esta consigna los cachorros revolucionarios se repartían el pastel entonces llamado El Carro Completo, o sea, todas las regidurías, diputaciones, presidencias municipales y gubernaturas quedaban en manos de los fieles seguidores del “Sufragio efectivo-con reelección”.

En 1989 llegaron los blanquiazules al poder y lo agarraron muy bien. Por 30 años nuevas familias y grupos políticos ejercieron las funciones gubernamentales, todo iba más o menos bien hasta que llegó “El Güero de Rancho” Mr. Kiko Vega y babalú las tortas: Las finanzas de la administración central se descuadraron y ya no hubo recursos para cubrir los numerosos adeudos vencidos.

-Pánfilo: Nuestro error fue darle el carro completo a Kiko. Sabiendo que el lenguaje es el espejo del alma, nos lastimaban sus declaraciones espontáneas; la bronca fue que -al parecer- no se le pudieron sacar mayores recursos presupuestales al presi Peña Nieto…

-Prisciliano: Peña Nieto era un gran estadista, solo que su formación ideológica a veces fallaba, había que hacer buenas negociaciones con los vecinos americanos mientras las fuerzas políticas de la oposición se empeñaban en bloquear los acuerdos cupulares por el bien de la patria…



-Pánfilo: Kiko sí le sabía a la administración de los recursos públicos, la cosa fue que bajaron los precios del crudo mexicano y ni modo manito, nuestro partido quedó desprotegido. Sin la actualización requerida para los nuevos tiempos de la globalización comercial, nuestras antiguas tesis basadas en el humanismo político quedaron rebasadas por la mercadotecnia de las redes sociales…

-Prisciliano: A nosotros nos faltó cálculo político, hicieron falta los nuevos cuadros de jóvenes conectados a las redes digitales, las masas empobrecidas crecieron al ritmo impuesto por el neoliberalismo y ya no votaron por nosotros, ya no hubo de piña, solo discursos vacíos sin sustento en la realidad…

-Pánfilo: A los pripanistas solo nos quedó unirnos para tratar de ofrecer algo novedoso en el mercado político-electoral, había que enfrentar muchos problemas sociales con pocos recursos económicos. Para B.C. los requerimientos de la gobernanza democrática nos desbordaron, la fórmula pripanista-perredista sufrió una derrota mayor y ya ni como alegarle al ampayer…

-Prisciliano: A nivel regional y local invitar a los del PRD complicó las cosas, derecha, centro e izquierda coaligados crearon una ensalada agridulce que no apeteció a los electores de BC.

El pripanismo unido sí pudo ser vencido y, ni hablar, solo un cambio de mentalidad nos puede ayudar para las próximas elecciones…

-Pánfilo: El pripanismo debe abandonar la mediocridad y arrogancia de los viejos tiempos, ahora se requiere de imaginación sociológica (para citar al clásico) todavía se le puede sacar agua al bule, debemos apoyar a los empresarios en sus negocios, pero a la actividad gubernamental solo deben llegar personas con mística social…

-Prisciliano: Perdón, pero ese concepto es nuestro, qué tal si pensamos en sacar a las mayorías populares de la pobreza, sin demagogia, sin poses falsas, sin memes absurdos…