/ domingo 5 de diciembre de 2021

Estudios Culturales para chicos y grandes

LA ESPIGA

Las ciudades de la frontera México-Estados Unidos han despertado el interés de los creadores de arte y cultura; lo mismo sucede con los mexicoamericanos radicados de aquel lado del cerco fronterizo.

Las ciudades fronterizas mexicanas de Tijuana a Matamoros han sido escenarios de diversos trabajos creativos, desde obras literarias y teatrales hasta producciones en medios audiovisuales. Los temas ligados a las múltiples identidades fronterizas por igual han captado la imaginación de todo tipo de hacedores de arte y cultura.

Filman “Hasta el fin del mundo” | Fotos : Jorge Galindo

El libro ya clásico de la investigadora Norma Iglesias: “Entre yerba, polvo y plomo: Lo fronterizo visto por el cine mexicano, Colef, 1991” es un valioso compendio de la producción cinematográfica mexicana orientada a mostrar tramas y sucesos propios de la franja fronteriza norte. Desde los braceros que migraron de sur a norte para ocuparse de las faenas agrícolas en los campos de cultivo americanos hasta los llamados “emigrados” o trabajadores trasfronterizos que optaron por buscar mejores horizontes laborales de aquel lado de la frontera.

Otra temática interesante es la referida a las comedias de aventuras rancheras, donde los protagonistas viven muy cerca de la frontera binacional y tienen nexos con sus familiares de ambos lados del cerco.

“De Nueva York a Huipanguillo”. Esta película de 1943 es una comedia turística donde un torero norteamericano se deleita en escenarios mexicanos y logra conquistar el corazón de damas mexicanas dispuestas a diversificar la herencia de “La Raza de Bronce”. En otras películas tenemos a personajes angloamericanos dispuestos a aventurarse en nuestra tierra de volcanes, los gringos llegan a la Ciudad de México y de ahí visitan Acapulco, Taxco, Cuernavaca y otras ciudades y pueblos pintorescos donde muestran su asombro por los paisajes mexicanos.

El melodrama de gángsteres y criminales que bajan de urbes norteamericanas y arriban a las ciudades fronterizas para incursionar en actividades delictivas, también generó un alto impacto en los cines de aquella época, el famoso director Juan Orol supo introducirse en esta temática con suma eficacia.

También existen los filmes al estilo del Viejo Oeste con vaqueros mexicanos y sus dificultades para integrarse a los ranchos y rancheros norteamericanos practicantes de un estilo de vida diferente al de los autóctonos.

Ciudad Juárez: Esta ciudad fronteriza con una intensa vida nocturna también atrae a los turistas gringos que vienen a buscar aventuras de todo tipo, en escenas intensas aparecen mujeres de la vida galante en relaciones complicadas con delincuentes y hampones explotadores de mujeres, sin faltar las bailarinas de rumba en noches interminables de juergas y disputas.

“Pito Pérez se va de bracero” (de 1947) es una tragicomedia donde de nuevo tenemos el tema de los braceros y el de los traficantes de indocumentados (llamados “Espaldas Mojadas”). Una temática abordada también por el Cine Negro norteamericano en la célebre película “Border Incident” filmada en locaciones de Mexicali, Calexico y El Centro.

La frontera EUA-MEX es una región de intensa actividad productiva, las relaciones sociales entre las comunidades pegadas al cerco nos hablan de MEX-AMÉRICA: Una zona común donde el “espanenglish” domina y las costumbres familiares mezclan lo mexicano y lo americano.

LA ESPIGA

Las ciudades de la frontera México-Estados Unidos han despertado el interés de los creadores de arte y cultura; lo mismo sucede con los mexicoamericanos radicados de aquel lado del cerco fronterizo.

Las ciudades fronterizas mexicanas de Tijuana a Matamoros han sido escenarios de diversos trabajos creativos, desde obras literarias y teatrales hasta producciones en medios audiovisuales. Los temas ligados a las múltiples identidades fronterizas por igual han captado la imaginación de todo tipo de hacedores de arte y cultura.

Filman “Hasta el fin del mundo” | Fotos : Jorge Galindo

El libro ya clásico de la investigadora Norma Iglesias: “Entre yerba, polvo y plomo: Lo fronterizo visto por el cine mexicano, Colef, 1991” es un valioso compendio de la producción cinematográfica mexicana orientada a mostrar tramas y sucesos propios de la franja fronteriza norte. Desde los braceros que migraron de sur a norte para ocuparse de las faenas agrícolas en los campos de cultivo americanos hasta los llamados “emigrados” o trabajadores trasfronterizos que optaron por buscar mejores horizontes laborales de aquel lado de la frontera.

Otra temática interesante es la referida a las comedias de aventuras rancheras, donde los protagonistas viven muy cerca de la frontera binacional y tienen nexos con sus familiares de ambos lados del cerco.

“De Nueva York a Huipanguillo”. Esta película de 1943 es una comedia turística donde un torero norteamericano se deleita en escenarios mexicanos y logra conquistar el corazón de damas mexicanas dispuestas a diversificar la herencia de “La Raza de Bronce”. En otras películas tenemos a personajes angloamericanos dispuestos a aventurarse en nuestra tierra de volcanes, los gringos llegan a la Ciudad de México y de ahí visitan Acapulco, Taxco, Cuernavaca y otras ciudades y pueblos pintorescos donde muestran su asombro por los paisajes mexicanos.

El melodrama de gángsteres y criminales que bajan de urbes norteamericanas y arriban a las ciudades fronterizas para incursionar en actividades delictivas, también generó un alto impacto en los cines de aquella época, el famoso director Juan Orol supo introducirse en esta temática con suma eficacia.

También existen los filmes al estilo del Viejo Oeste con vaqueros mexicanos y sus dificultades para integrarse a los ranchos y rancheros norteamericanos practicantes de un estilo de vida diferente al de los autóctonos.

Ciudad Juárez: Esta ciudad fronteriza con una intensa vida nocturna también atrae a los turistas gringos que vienen a buscar aventuras de todo tipo, en escenas intensas aparecen mujeres de la vida galante en relaciones complicadas con delincuentes y hampones explotadores de mujeres, sin faltar las bailarinas de rumba en noches interminables de juergas y disputas.

“Pito Pérez se va de bracero” (de 1947) es una tragicomedia donde de nuevo tenemos el tema de los braceros y el de los traficantes de indocumentados (llamados “Espaldas Mojadas”). Una temática abordada también por el Cine Negro norteamericano en la célebre película “Border Incident” filmada en locaciones de Mexicali, Calexico y El Centro.

La frontera EUA-MEX es una región de intensa actividad productiva, las relaciones sociales entre las comunidades pegadas al cerco nos hablan de MEX-AMÉRICA: Una zona común donde el “espanenglish” domina y las costumbres familiares mezclan lo mexicano y lo americano.