/ lunes 5 de octubre de 2020

La corrupción no se consulta, se combate

LA POLÍTICA DE LAS PERSONAS

Desde hace ya unas semanas se inició una consulta popular a nivel nacional con el fin de que la ciudadanía opine si se debe investigar y enjuiciar o no por sus presuntos actos de corrupción a cinco ex presidentes de la República: Carlos Salinas de Gortari, Ernesto Zedillo, Vicente Fox, Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto.

La Suprema Corte de Justicia de la Nación hace unos días proclamó como constitucional dicha consulta. Sin embargo, más que analizar si el fallo de la Corte fue oportuno o no, lo primero que debemos reflexionar es el simple hecho de que se haya realizado la consulta, pues preocupa que las autoridades tengan que llamar a junta de firmas para hacer su trabajo de perseguir la justicia.

Las personas tenemos derecho a utilizar instrumentos de participación ciudadana con el fin de intervenir y participar en las decisiones públicas. Uno de ellos es la consulta popular, pero no es lo mismo que la ciudadanía llamemos a junta de firmas para crear o modificar leyes que abonen al combate a la corrupción a que la autoridad junte firmas para ver si hacen o no su trabajo en combatirla. Para las personas es una exigencia que se investiguen y se castiguen los actos de corrupción, pero para la autoridad es su obligación y no debemos de permitir que utilicen los instrumentos de participación ciudadana con el fin de justificar su falta de trabajo. Si hay evidencia de que hubo actos de corrupción por parte de un ex mandatario, su obligación es investigarlo y en su caso castigarlo.

Por si a las autoridades no les ha quedado claro, las personas sí queremos que se investiguen y castiguen a servidores públicos que han abusado de nuestra confianza y han cometido actos de corrupción en su mandato, inclusive es tanto lo que lo queremos que por ser ese el principal discurso de campaña del gobierno en turno fue que su partido político ganó la gran mayoría de las elecciones. Es absurdo que hoy gasten dinero en preguntarnos algo que ni siquiera debería ser pregunta.

No caigamos en juegos y discursos que sólo llevan a la confusión, la consulta ciudadana no es necesaria para perseguir delitos de corrupción, para eso existen y mantenemos a instancias enormes como la Fiscalía General de la República o las Fiscalías Generales de los Estados. Y es que en nuestro país para hacer justicia no hace falta preguntarnos, hace falta que la autoridad tenga el valor de hacerlo y que las personas jamás nos cansemos de exigirla.

flores.aguirre@hotmail.com

LA POLÍTICA DE LAS PERSONAS

Desde hace ya unas semanas se inició una consulta popular a nivel nacional con el fin de que la ciudadanía opine si se debe investigar y enjuiciar o no por sus presuntos actos de corrupción a cinco ex presidentes de la República: Carlos Salinas de Gortari, Ernesto Zedillo, Vicente Fox, Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto.

La Suprema Corte de Justicia de la Nación hace unos días proclamó como constitucional dicha consulta. Sin embargo, más que analizar si el fallo de la Corte fue oportuno o no, lo primero que debemos reflexionar es el simple hecho de que se haya realizado la consulta, pues preocupa que las autoridades tengan que llamar a junta de firmas para hacer su trabajo de perseguir la justicia.

Las personas tenemos derecho a utilizar instrumentos de participación ciudadana con el fin de intervenir y participar en las decisiones públicas. Uno de ellos es la consulta popular, pero no es lo mismo que la ciudadanía llamemos a junta de firmas para crear o modificar leyes que abonen al combate a la corrupción a que la autoridad junte firmas para ver si hacen o no su trabajo en combatirla. Para las personas es una exigencia que se investiguen y se castiguen los actos de corrupción, pero para la autoridad es su obligación y no debemos de permitir que utilicen los instrumentos de participación ciudadana con el fin de justificar su falta de trabajo. Si hay evidencia de que hubo actos de corrupción por parte de un ex mandatario, su obligación es investigarlo y en su caso castigarlo.

Por si a las autoridades no les ha quedado claro, las personas sí queremos que se investiguen y castiguen a servidores públicos que han abusado de nuestra confianza y han cometido actos de corrupción en su mandato, inclusive es tanto lo que lo queremos que por ser ese el principal discurso de campaña del gobierno en turno fue que su partido político ganó la gran mayoría de las elecciones. Es absurdo que hoy gasten dinero en preguntarnos algo que ni siquiera debería ser pregunta.

No caigamos en juegos y discursos que sólo llevan a la confusión, la consulta ciudadana no es necesaria para perseguir delitos de corrupción, para eso existen y mantenemos a instancias enormes como la Fiscalía General de la República o las Fiscalías Generales de los Estados. Y es que en nuestro país para hacer justicia no hace falta preguntarnos, hace falta que la autoridad tenga el valor de hacerlo y que las personas jamás nos cansemos de exigirla.

flores.aguirre@hotmail.com