/ miércoles 4 de noviembre de 2020

“No contienen capacidad”

EL MURO

En los mensajes sobre Covid compartidos por el Gobernador y la Alcaldesa mexicalense, deberían mostrarse etiquetas de advertencia en forma octagonal fondo color negro con letras blancas en mayúsculas, con las leyendas: “No contienen capacidad” y “Exceso de torpezas”. Será decisión del usuario si confía en el contenido.

Ya son ocho meses de manejo pandémico gubernamental defectuoso, de simular actos contundentes, de culpar a otros. Son ochos meses de nadar de muertito sin importarles los muertos, de querer tener contentos a todos porque la elección está a la vista, pero especialmente son ocho meses de no lastimar a los poderosos.

Para acontecimientos extraordinarios se requieren actos extraordinarios realizados por personas extraordinarias, no politiquería implementada por sujetos ordinarios. Ahora podemos ver con mucha claridad que las competencias necesarias para trascender en el mundillo de la política no están relacionadas con la capacidad para resolver problemas sociales cotidianos y mucho menos uno como el actual.

Pero ni se emocionen los panistas porque seguramente ellos lo estarían manejando igual de mal o peor, ni de chiste lo harían mejor porque no se trata de partidos ni de ideologías, sino de un sistema curtido a punta de oportunistas. Lastimosamente, la política gubernativa es una lucha en busca de encaramarse en el poder para luego servirse de el. No llegan los más capaces, ni los más entendidos de la realidad social, llegan los que supieron cómo sobrevivir a ese ambiente y ya en funciones, echando a perder aprenden.

Así que viéndolo desde esa perspectiva, resulta normal que nuestras autoridades se estén haciendo bolas con la pandemia. Tuvieron la mala fortuna de llegar al poder en estos momentos de crisis, la cual los ha desnudado, mostrando sus debilidades y nula capacidad. Hacen el esfuerzo por enfrentar la situación, pero no les alcanza para más, a pesar de tener muchísimo talento a su alrededor.

En el planeta, los políticos más aptos (todos podrán estar cortados con la misma tijera, pero el entorno los presiona a ser menos malos) entendieron las señales y se pusieron las pilas desde finales de 2019. Nosotros tenemos la ventaja de que hemos podido ver con meses de anticipación lo que ocurre en Europa y ni así la autoridad es capaz de armar una estrategia medianamente exitosa.

Ya sabíamos de la natural rebeldía humana ante las reglas; ya sabíamos de nuestro nulo civismo; ya sabíamos de la indisciplina, lo que no sabíamos muy bien es qué tan torpes resultarían ser nuestros gobernantes.

vicmarcen09@gmail.com


EL MURO

En los mensajes sobre Covid compartidos por el Gobernador y la Alcaldesa mexicalense, deberían mostrarse etiquetas de advertencia en forma octagonal fondo color negro con letras blancas en mayúsculas, con las leyendas: “No contienen capacidad” y “Exceso de torpezas”. Será decisión del usuario si confía en el contenido.

Ya son ocho meses de manejo pandémico gubernamental defectuoso, de simular actos contundentes, de culpar a otros. Son ochos meses de nadar de muertito sin importarles los muertos, de querer tener contentos a todos porque la elección está a la vista, pero especialmente son ocho meses de no lastimar a los poderosos.

Para acontecimientos extraordinarios se requieren actos extraordinarios realizados por personas extraordinarias, no politiquería implementada por sujetos ordinarios. Ahora podemos ver con mucha claridad que las competencias necesarias para trascender en el mundillo de la política no están relacionadas con la capacidad para resolver problemas sociales cotidianos y mucho menos uno como el actual.

Pero ni se emocionen los panistas porque seguramente ellos lo estarían manejando igual de mal o peor, ni de chiste lo harían mejor porque no se trata de partidos ni de ideologías, sino de un sistema curtido a punta de oportunistas. Lastimosamente, la política gubernativa es una lucha en busca de encaramarse en el poder para luego servirse de el. No llegan los más capaces, ni los más entendidos de la realidad social, llegan los que supieron cómo sobrevivir a ese ambiente y ya en funciones, echando a perder aprenden.

Así que viéndolo desde esa perspectiva, resulta normal que nuestras autoridades se estén haciendo bolas con la pandemia. Tuvieron la mala fortuna de llegar al poder en estos momentos de crisis, la cual los ha desnudado, mostrando sus debilidades y nula capacidad. Hacen el esfuerzo por enfrentar la situación, pero no les alcanza para más, a pesar de tener muchísimo talento a su alrededor.

En el planeta, los políticos más aptos (todos podrán estar cortados con la misma tijera, pero el entorno los presiona a ser menos malos) entendieron las señales y se pusieron las pilas desde finales de 2019. Nosotros tenemos la ventaja de que hemos podido ver con meses de anticipación lo que ocurre en Europa y ni así la autoridad es capaz de armar una estrategia medianamente exitosa.

Ya sabíamos de la natural rebeldía humana ante las reglas; ya sabíamos de nuestro nulo civismo; ya sabíamos de la indisciplina, lo que no sabíamos muy bien es qué tan torpes resultarían ser nuestros gobernantes.

vicmarcen09@gmail.com