/ lunes 15 de febrero de 2021

Nuestra participación cuenta

LA POLÍTICA DE LAS PERSONAS

Obstaculizar la participación de las personas no dándoles herramientas necesarias para que su participación sea válida, también es corrupción.

Por el simple hecho de ser ciudadanas y ciudadanos, todos tenemos el poder de modificar, crear o anular leyes o decisiones que se tomen en nuestro país, Estado y municipio. Sin embargo, la realidad es que las personas podemos organizarnos, juntar firmas y esforzarnos, pero al final seguimos quedando en ciertas manos para que dicha participación concluya en lo que las personas buscamos.

Servidores públicos vienen y van y todos desde las candidaturas hasta que son servidores públicos, es común que escuchemos en su discurso que a las personas nos escuchan y que están a favor de nuestra participación. Sin embargo, dicho discurso queda en el aire si no hacen nada para que nuestra participación quede defendida ante la ley. A muchos servidores públicos les da miedo nuestra participación activa a través de las herramientas que la misma ley nos ofrece, ya que el poder que las personas tenemos y podemos llegar a tener es crucial en la toma de decisiones de nuestro entorno.

Actualmente las herramientas y el cómo podemos participar viene establecido en la Ley de Participación Ciudadana. Sin embargo, su teoría es muy diferente a la práctica y nuestros diputados y diputadas brillan por su ausencia en querer modificarla, así como otros servidores públicos en siquiera intentar impulsarla. Mientras dicha Ley no cuente con más herramientas y defienda a las personas a través de términos y sanciones para los servidores públicos que no cumplan con el seguimiento a nuestras exigencias, seguiremos sin avanzar en sacar adelante los temas que más nos importan.

El hecho de que la Ley actualmente no esté plenamente a nuestro favor, no quiere decir que no podamos participar de distintas maneras, muchas veces se ha demostrado que es a través de la presión social como podemos impulsar muchos temas que nos importan en nuestro entorno; toma tiempo y paciencia, sin embargo siempre valdrá la pena defender lo que es nuestro.

Ya se acercan las campañas y las personas tenemos que estar preparadas para saber exactamente qué exigirles a los próximos candidatos y candidatas. Una de ellas es defender realmente nuestra participación, pues no defenderla significa seguir simulando que les interesa involucrarnos en la toma de decisiones de nuestra comunidad.

flores.aguirre@hotmail.com

LA POLÍTICA DE LAS PERSONAS

Obstaculizar la participación de las personas no dándoles herramientas necesarias para que su participación sea válida, también es corrupción.

Por el simple hecho de ser ciudadanas y ciudadanos, todos tenemos el poder de modificar, crear o anular leyes o decisiones que se tomen en nuestro país, Estado y municipio. Sin embargo, la realidad es que las personas podemos organizarnos, juntar firmas y esforzarnos, pero al final seguimos quedando en ciertas manos para que dicha participación concluya en lo que las personas buscamos.

Servidores públicos vienen y van y todos desde las candidaturas hasta que son servidores públicos, es común que escuchemos en su discurso que a las personas nos escuchan y que están a favor de nuestra participación. Sin embargo, dicho discurso queda en el aire si no hacen nada para que nuestra participación quede defendida ante la ley. A muchos servidores públicos les da miedo nuestra participación activa a través de las herramientas que la misma ley nos ofrece, ya que el poder que las personas tenemos y podemos llegar a tener es crucial en la toma de decisiones de nuestro entorno.

Actualmente las herramientas y el cómo podemos participar viene establecido en la Ley de Participación Ciudadana. Sin embargo, su teoría es muy diferente a la práctica y nuestros diputados y diputadas brillan por su ausencia en querer modificarla, así como otros servidores públicos en siquiera intentar impulsarla. Mientras dicha Ley no cuente con más herramientas y defienda a las personas a través de términos y sanciones para los servidores públicos que no cumplan con el seguimiento a nuestras exigencias, seguiremos sin avanzar en sacar adelante los temas que más nos importan.

El hecho de que la Ley actualmente no esté plenamente a nuestro favor, no quiere decir que no podamos participar de distintas maneras, muchas veces se ha demostrado que es a través de la presión social como podemos impulsar muchos temas que nos importan en nuestro entorno; toma tiempo y paciencia, sin embargo siempre valdrá la pena defender lo que es nuestro.

Ya se acercan las campañas y las personas tenemos que estar preparadas para saber exactamente qué exigirles a los próximos candidatos y candidatas. Una de ellas es defender realmente nuestra participación, pues no defenderla significa seguir simulando que les interesa involucrarnos en la toma de decisiones de nuestra comunidad.

flores.aguirre@hotmail.com