ENTRE TECLAS
El campo mexicano en el sector de la economía garantiza a los 126 millones de mexicanos la mayor parte de los alimentos tanto de origen agrícola como ganadero, es decir, maíz, trigo, frijol, arroz, carne y leche; además de una amplia variedad de frutas y verduras.
Dicho así todo parece muy sencillo: El campo produce y la ciudad consume, pero lo cierto es que la situación es mucho más complicada.
Durante el 2021 la pandemia tuvo efectos negativos en casi todos los sectores económicos, excepto el agropecuario. De acuerdo con información de la SADER la producción agropecuaria y pesquera del año agrícola 2020 presentó un crecimiento anual del 1%. La productividad de este sector continúa al alza, lo que refleja que el trabajo de las personas trabajadoras agrícolas no ha parado desde que inició la pandemia, aunque existan condiciones de riesgo debido a la alta tasa de contagios por Covid-19.
Un aspecto fundamental para la producción agropecuaria en México es el presupuesto federal para el siguiente año; los diputados federales han tenido en los últimos días acaloradas discusiones para acordar el presupuesto para 2022. El sector del campo siempre provoca el enfrentamiento entre los legisladores de los diferentes partidos.
El Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2022 plantea un aumento de 4.1% en términos reales respecto del presupuesto aprobado en 2021 (50 mil 967 millones de pesos). Sin embargo, cabe precisar que tras la eliminación de diversos programas presupuestarios, de 2019 a 2020 hubo un decremento de 29.2% en términos reales de los recursos para SADER (21 mil 543 millones menos). Además, en 2019 se asignaron 73 mil 542 millones de pesos a esta Secretaría, de los cuales 3 mil 732 millones no fueron ejercidos. Este subejercicio representa 5 % de los recursos.
Cabe comentar que el presupuesto para el sector agropecuario sigue resultando insuficiente tomando en cuenta que 55% de los habitantes de zonas rurales se encuentran en situación de pobreza, de acuerdo con el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) incluso, el monto para 2022 está 27% por debajo del presupuesto asignado a 2019 (73 mil 542 millones de pesos).
El gobierno pretende alcanzar los objetivos de la SADER a través de siete programas presupuestarios que representan 68.5% de los recursos asignados a esta dependencia. Entre estos programas se encuentra el programa prioritario Fertilizantes con un aumento de 26 %. No obstante, una evaluación del Coneval señala que este programa presenta inconsistencias, ya que no establece su población objetivo, no cuenta con un padrón de beneficiarios y requiere un diagnóstico sobre el problema que busca atender.
Falta ver los detalles de lo que será el presupuesto para a conocer con exactitud los apoyos y programas de fomento que se otorguen a los agricultores del norte del país, es decir, los grandes productores de maíz, trigo y frijol de Baja California, Sonora, Sinaloa, Zacatecas, Guanajuato, Chihuahua, Coahuila y Tamaulipas, que son fundamentalmente quienes producen a gran escala, garantizando la alimentación de los mexicanos.
