/ sábado 25 de enero de 2020

Tutti frutti sabatini

Vientos


Para mi nieto Francisco Javier González Pardo que sabrá interpretar con su inteligencia el mensaje que encierra lo que expongo.


En México, decía mi maestro Jesús Sandoval, “todo hay que descifrarlo desde el otero inevitable de la política”, de lo que no escapa el marco del asunto de la empresa internacional cervecera Constellation Brands.

Conocemos –por exposición explicitada de sus representantes– su inversión de 1,500 millones de dólares, que permitirán abrir, dicen, arriba de 5 mil empleos directos y más del triple de indirectos, lo que parece ser ya una realidad, si el “diablo mayor” no mete “su cola” con otra de sus ocurrencias sorpresivas y lo evita.

Como no conozco a ningún funcionario de Constellation Brands, tomo de sus declaraciones y las de los comisionados para investigar si tal empresa dañaría a los agricultores del Valle de Mexicali y beneficiarios del agua del río Colorado de Tecate, Tijuana, Ensenada y desde luego Mexicali. De tales declaraciones digo, tomo sus textos para manifestar que desde la aparición de Constellation, me sumé a lo declarado por los científicos que afirmaron que la operación de tal empresa internacional era viable y sin riesgo alguno. Así lo escribí en su momento.

Por otra parte, Mexicali es una plaza cervecera tradicional. Durante su inicio poblacional se construyeron dos empresas de tal jaez: De Anza y Mexicali. La primera no duró mucho. La segunda fue líder en todo el territorio norbajacaliforniano y surcaliforniano. Y no se secó el río Colorado que tanto angustia a los políticos dirigidos por líderes obtusos en materia de inversiones, pero duchos en lo político.

Y cómo no: ¿Se acuerda usted de la invasión de gentes frente al edificio municipal cachanilla, cuyos recursos para holgazanear y molestar a la gente ajena con sus gritos y sombrerazos? Pues acuérdese que protestaban por la instalación de Constellation… y no eran campesinos, eran tronadores de cohetes políticos. Pero tal vez sí se acuerde que después del triunfo de “Morena” desaparecieron. Se había cumplido su objetivo a pesar de que hubo pocos comparsas en los medios.

Incluso se acordará que un cirquero sin circo subió a la punta de una grúa en terrenos de esa empresa vituperada entonces, amenazando tirarse como Juan Escutia. Pero le faltaron lo que a Juárez –no don Benito-, sino aquel que cayó de un brinco fatal desde la Torre del Monumento de la Independencia, como dijo Erasmo Salomón, su publicista ocasional.

Hoy “Morena”, cuando “ya todo está en calma y el músculo duerme”, apapacha a Constellation y “se somete” a las conclusiones de los científicos y técnicos nombrados por el nombrador poderoso para limpiar el terreno de abrojos y retornar los espacios de la necesaria búsqueda de inversiones extranjeras. Todo arreglado respecto a la realidad internacional que por cierto se inició en las dos administraciones municipales previas al arribo de la inteligente presidenta municipal Marina del Pilar Ávila Olmeda, que se apresta ya a expedir los documentos de exigencia para que emerja de sus casi cenizas el nuevo ave Fénix: Constellation Brands; a quien este modesto escribidor les desea éxito y ya no tropiecen con piedras similares (en el cerebro).

Como usted lo ve, “Morena” triunfó por la hartura ciudadana con sus excepciones. 30 millones de votos lo afirman, creo que hartos hasta de sí mismos… mostrando, públicamente, que el juego es la política… ¿No se da cuenta?


Vientos


Para mi nieto Francisco Javier González Pardo que sabrá interpretar con su inteligencia el mensaje que encierra lo que expongo.


En México, decía mi maestro Jesús Sandoval, “todo hay que descifrarlo desde el otero inevitable de la política”, de lo que no escapa el marco del asunto de la empresa internacional cervecera Constellation Brands.

Conocemos –por exposición explicitada de sus representantes– su inversión de 1,500 millones de dólares, que permitirán abrir, dicen, arriba de 5 mil empleos directos y más del triple de indirectos, lo que parece ser ya una realidad, si el “diablo mayor” no mete “su cola” con otra de sus ocurrencias sorpresivas y lo evita.

Como no conozco a ningún funcionario de Constellation Brands, tomo de sus declaraciones y las de los comisionados para investigar si tal empresa dañaría a los agricultores del Valle de Mexicali y beneficiarios del agua del río Colorado de Tecate, Tijuana, Ensenada y desde luego Mexicali. De tales declaraciones digo, tomo sus textos para manifestar que desde la aparición de Constellation, me sumé a lo declarado por los científicos que afirmaron que la operación de tal empresa internacional era viable y sin riesgo alguno. Así lo escribí en su momento.

Por otra parte, Mexicali es una plaza cervecera tradicional. Durante su inicio poblacional se construyeron dos empresas de tal jaez: De Anza y Mexicali. La primera no duró mucho. La segunda fue líder en todo el territorio norbajacaliforniano y surcaliforniano. Y no se secó el río Colorado que tanto angustia a los políticos dirigidos por líderes obtusos en materia de inversiones, pero duchos en lo político.

Y cómo no: ¿Se acuerda usted de la invasión de gentes frente al edificio municipal cachanilla, cuyos recursos para holgazanear y molestar a la gente ajena con sus gritos y sombrerazos? Pues acuérdese que protestaban por la instalación de Constellation… y no eran campesinos, eran tronadores de cohetes políticos. Pero tal vez sí se acuerde que después del triunfo de “Morena” desaparecieron. Se había cumplido su objetivo a pesar de que hubo pocos comparsas en los medios.

Incluso se acordará que un cirquero sin circo subió a la punta de una grúa en terrenos de esa empresa vituperada entonces, amenazando tirarse como Juan Escutia. Pero le faltaron lo que a Juárez –no don Benito-, sino aquel que cayó de un brinco fatal desde la Torre del Monumento de la Independencia, como dijo Erasmo Salomón, su publicista ocasional.

Hoy “Morena”, cuando “ya todo está en calma y el músculo duerme”, apapacha a Constellation y “se somete” a las conclusiones de los científicos y técnicos nombrados por el nombrador poderoso para limpiar el terreno de abrojos y retornar los espacios de la necesaria búsqueda de inversiones extranjeras. Todo arreglado respecto a la realidad internacional que por cierto se inició en las dos administraciones municipales previas al arribo de la inteligente presidenta municipal Marina del Pilar Ávila Olmeda, que se apresta ya a expedir los documentos de exigencia para que emerja de sus casi cenizas el nuevo ave Fénix: Constellation Brands; a quien este modesto escribidor les desea éxito y ya no tropiecen con piedras similares (en el cerebro).

Como usted lo ve, “Morena” triunfó por la hartura ciudadana con sus excepciones. 30 millones de votos lo afirman, creo que hartos hasta de sí mismos… mostrando, públicamente, que el juego es la política… ¿No se da cuenta?