/ sábado 8 de mayo de 2021

Tutti frutti sabatini

VIENTOS

Sin ninguna duda, el mercado ha sido inserto en un cambio de poder político que ha dejado desconcertados a los propios provocadores en sus niveles inferiores.

Me estoy refiriendo a que la globalización de los mercados ha sido una irrupción social tan inesperada provocada por las grandes cúpulas empresariales en contubernio, que “los pequeños” empresarios han sido, poco a poco, empujados a los terrenos de la política en donde han ocupado los espacios que antes se definían y respetaban con precisión.

Como historia ilustrativa, en el Museo Británico de Londres, existe un papiro que es la obra más antigua sobre filosofía política, sobre el cómo adecentar la política lo que confirma que la suciedad en política existente en las autoridades no es una novedad. Estamos escribiendo de una obra intitulada “Enseñanzas del antiguo Egipto” del año 2,614 a de C. en Egipto, y ¡asómbrese! 2,300 años antes de Confucio, Sócrates y Buda.

Por supuesto que priva en la obra una encantadora inocencia en un comparativo infame con el poder político que se vino conformando con el tiempo, a veces brutal en extremo. Pero estas luchas por el poder han llegado hoy, entre nosotros los mexicanos, con violencia desmedida... y peor aún, en medio de una pandemia de coronavirus costosa en dinero y en vidas humanas: un cuarto de millón de muertos... por falta de vacunas a tiempo ordenadas.

En el camino histórico, desde el primer clan que nació con el humano erguido (Homo sapiens), en que el poder o autoridad prima lo obtiene el más fuerte físicamente y lo impone de esa manera, llega a nuestros días luego de una serie de transformaciones revestidas con diversos atuendos hasta la democracia - que no es novedad - pero en la que ya no cabe ni la tienen presencia la moral ni la ética como fuera lógico.

“El cambio del poder”, cuya autoría es del escritor norteamericano Alvin Toffler (“Powershift”, en su versión original con edición en castellano de 1990 es de Plaza & James), señala él cómo la economía (el mercado mundial) al encaramarse sobre (y gracias a) los poderes democráticos tradicionales perdieron su base y hoy son suplidas por las altas cumbres empresariales que “todos los días votan” y así ordenan el comportamiento de los gobiernos que ya no les son ajenos. Es el nuevo poder global al que acompaña los medios de información digitales y los militares como blindaje.

Así llega a nuestros días Joaquín Estefanía con su obra “El poder en el mundo”, que afirma más la puntería y define el poder político como “esencialmente amoral” y entonces ¡ya está dicho todo!

¿Cómo podemos sustraernos los mexicanos a una pudrición mundial? ¡Es otra pandemia! Obsérvelo el lector sin pasiones bárbaras: Cuando hoy presidente Andrés Manuel López Obrador aparece en escena con su 4T, el mundo empresarial mexicano sufre terriblemente y se azota. No quiere cambios, quiere que todo quede como antes.... ¿Y entonces cómo barrer la corrupción heredada? Tan simple como eso la guerra de Coparmex contra López Obrador. La poderosa garra del globalismo económico mundial no quiere perder esta “presa” y es así como dos poderes afinan sus armas: el del dinero y el oficial apoyado por el pueblo todavía y es, aún, el dueño del poder político y lo sabe manejar.

Este modesto escribidor cree que es mejor para México llevar la fiesta en paz que una nueva revolución…

jaimepardo1928@gmail.com

VIENTOS

Sin ninguna duda, el mercado ha sido inserto en un cambio de poder político que ha dejado desconcertados a los propios provocadores en sus niveles inferiores.

Me estoy refiriendo a que la globalización de los mercados ha sido una irrupción social tan inesperada provocada por las grandes cúpulas empresariales en contubernio, que “los pequeños” empresarios han sido, poco a poco, empujados a los terrenos de la política en donde han ocupado los espacios que antes se definían y respetaban con precisión.

Como historia ilustrativa, en el Museo Británico de Londres, existe un papiro que es la obra más antigua sobre filosofía política, sobre el cómo adecentar la política lo que confirma que la suciedad en política existente en las autoridades no es una novedad. Estamos escribiendo de una obra intitulada “Enseñanzas del antiguo Egipto” del año 2,614 a de C. en Egipto, y ¡asómbrese! 2,300 años antes de Confucio, Sócrates y Buda.

Por supuesto que priva en la obra una encantadora inocencia en un comparativo infame con el poder político que se vino conformando con el tiempo, a veces brutal en extremo. Pero estas luchas por el poder han llegado hoy, entre nosotros los mexicanos, con violencia desmedida... y peor aún, en medio de una pandemia de coronavirus costosa en dinero y en vidas humanas: un cuarto de millón de muertos... por falta de vacunas a tiempo ordenadas.

En el camino histórico, desde el primer clan que nació con el humano erguido (Homo sapiens), en que el poder o autoridad prima lo obtiene el más fuerte físicamente y lo impone de esa manera, llega a nuestros días luego de una serie de transformaciones revestidas con diversos atuendos hasta la democracia - que no es novedad - pero en la que ya no cabe ni la tienen presencia la moral ni la ética como fuera lógico.

“El cambio del poder”, cuya autoría es del escritor norteamericano Alvin Toffler (“Powershift”, en su versión original con edición en castellano de 1990 es de Plaza & James), señala él cómo la economía (el mercado mundial) al encaramarse sobre (y gracias a) los poderes democráticos tradicionales perdieron su base y hoy son suplidas por las altas cumbres empresariales que “todos los días votan” y así ordenan el comportamiento de los gobiernos que ya no les son ajenos. Es el nuevo poder global al que acompaña los medios de información digitales y los militares como blindaje.

Así llega a nuestros días Joaquín Estefanía con su obra “El poder en el mundo”, que afirma más la puntería y define el poder político como “esencialmente amoral” y entonces ¡ya está dicho todo!

¿Cómo podemos sustraernos los mexicanos a una pudrición mundial? ¡Es otra pandemia! Obsérvelo el lector sin pasiones bárbaras: Cuando hoy presidente Andrés Manuel López Obrador aparece en escena con su 4T, el mundo empresarial mexicano sufre terriblemente y se azota. No quiere cambios, quiere que todo quede como antes.... ¿Y entonces cómo barrer la corrupción heredada? Tan simple como eso la guerra de Coparmex contra López Obrador. La poderosa garra del globalismo económico mundial no quiere perder esta “presa” y es así como dos poderes afinan sus armas: el del dinero y el oficial apoyado por el pueblo todavía y es, aún, el dueño del poder político y lo sabe manejar.

Este modesto escribidor cree que es mejor para México llevar la fiesta en paz que una nueva revolución…

jaimepardo1928@gmail.com