Horas y horas para consumir hasta 80 kilómetros de nado semanal, así como entrenamientos en gimnasio para cardio y fuerza, tienen a Martha Rocío Sandoval Ayala buscando su mejor marca para llegar a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.
La disciplina parece una obviedad para un atleta de alto rendimiento, pero para ella, una chica de 21 años mexicalense, su vida deportiva la combina con su otra pasión, los estudios en el Centro de Enseñanza Técnica y Superior (CETYS) Universidad.
Su juventud le permite soñar en alcanzar lugar en una prueba demandante que implica desgaste físico importante, 10 kilómetros en aguas abiertas, prueba poco conocida y hace apenas en los pasados Juegos Olímpicos en Río de Janeiro ingresó al programa olímpico.
Este día viajará de la Ciudad de México rumbo a Qatar, sede del Campeonato Mundial de playa que incluye la prueba de aguas abiertas, aunque en 5 kilómetros.
“El entrenamiento ha estado más enfocado a esto, en realidad es una competencia de fogueo se puede decir, ya que no es lo que comúnmente nado, ya que nado 10 kilómetros y esta competencia es de 5 kilómetros, sin embargo sirve para competir con las que estarán buscando el pase a Juegos Olímpicos”.
Su cita con el futuro será el 13 de octubre, cuando en la ciudad de Doha, Qatar, salga en la búsqueda de su mejor rendimiento.
“El selectivo lo hacen en junio del próximo año, pasan las primeras 10 o 14 a los Juegos Olímpicos en el Mundial de aguas abiertas, en julio pasaron otras diez, tendría que quedar entre las diez primeras”, mencionó en la zona acuática de la Ciudad Deportiva, donde entrena bajo las indicaciones de Paulo Salas.
Martha Rocío explicó que las mejores nadadoras de Brasil, Italia, Estados Unidos y Francia son sus máximas oponentes, así como Martha Aguilar (de Tijuana).
INICIOS
Los comienzos de Sandoval Ayala fueron en clases particulares en una alberca privada, luego que a su hermana le recomendaron acudir a la Ciudad Deportiva para mejorar y su madre también la llevó, entonces con unos 8 años.
“Nos trajeron y nos llamaron para el preequipo, desde los 8 años estoy compitiendo con el equipo CAAN y luego Mexicali Nadadores, a los 12 años fui a mi primera Olimpiada -Nacional-, luego de los 14 a los 19 años fui medallista en aguas abiertas en Olimpiada Nacional”.
Su crecimiento continuó hasta que calificó al Mundial en Budapest en el 2017, así como ha representado a México en Juegos Centroamericanos, Panamericanos y Copas del Mundo.
En el 2017 asistió al Mundial de Budapest muy joven. “No me fue como esperaba, pero me sirvió”, luego alcanzó la medalla de plata en los Juegos Centroamericanos y del Caribe en Baranquilla, Colombia, en el 2018.
En la Copa del Mundo terminó en el lugar 41 en Corea del Sur en julio del actual y en los Juegos Panamericanos en Lima, Perú, quedó en octavo sitio.
La estudiante del séptimo semestre de Ingeniería Industrial en el CETYS Universidad regresará con el tiempo justo para representar a su escuela en el Campeonato Nacional de Escuelas Privadas del 21 al 25 de octubre en Mexicali.
Aunque aparentemente nadar kilómetros y kilómetros encerrada entre cuatro paredes puede resultar aburrido, para Martha no lo es.
“Me parece que no es tan monótono, los entrenamientos son dinámicos, no sólo es nadar, sino también hacer ejercicio afuera, correr, gimnasio, cardio, entreno en doble sesión al día, a veces una”, explicó con una sonrisa. Para ella, es obvio, su mundo es el agua.
Ser atleta elite le permite viajar y representar a México en torneos internacionales y muy pocos tienen ese privilegio.
Entre los países que ha visitado se encuentran Puerto Rico, Trinidad y Tobago, Colombia, Perú, Corea del Sur, Hungría, Portugal y Estados Unidos, desde luego también muchas ciudades del país.
Se dice que los deportistas solo conocen el hotel y el lugar de competencia, pero ¿tienes oportunidad de conocer algo de las ciudades que visitas?
“Hay veces que sí, aunque vas enfocado a la competencia, ya terminando podemos ir a conocer algo rápido, creo que Budapest es lo que más me ha gustado, he ido dos veces”.
Martha posa para las últimas fotos junto a las piscinas, se le ve en su ambiente, feliz, muy cerca de su hábitat, el agua.