El boxeo recuperó hace un año una parte de la credibilidad que había perdido, vio encarnada la historia de Rocky Balboa y un boxeador de raíces mexicalenses fue su principal protagonista.
La noche del 1 de junio en el Madison Square Garden de New York. Un entonces desconocido Andy Ruiz se encargó de poner su nombre en la élite del boxeo.
El boxeador de Imperial, California, que había representado a Baja California en la Olimpiada Nacional y que se encontraba cerca de tomar la decisión de retirarse del boxeo profesional, escribió una de las páginas más gloriosas en la historia del deporte.
Ruiz, ese púgil de la división de peso Completo, que había conseguido la pelea ante el invicto británico Anthony Joshua por un mensaje en redes sociales. Unió a un país entero.
El Madison Square Garden, inaugurado en febrero de 1968, es uno de los escenarios más importantes de la historia. Entre los deportes y la música parecía haber atestiguado todo. Pero aún le faltaba agregar un capítulo más a su rica historia.
A los conciertos de Led Zepellin, de Michael Jackson, los épicos juegos de NBA o las peleas de Muhammad Ali, Joe Frazier y Sugar Ray Robinson, había que sumarle la pelea entre Andy Ruiz y Anthony Joshua.
La historia romántica de David contra Goliat. Ruiz llegaba como retador por los títulos AMB, OMB y FIB de Joshua.
Ruíz, con 10 centímetros menos de estatura, contra la mediática carrera de Joshua, ponían al británico como máximo favorito en su debut en Estados Unidos.
Los primeros dos asaltos no ofrecieron mucho espectáculo y parecían cumplirse los pronósticos cuando Joshua mandó a Ruiz a la lona en el tercer round.
Pero lo mejor estaba por venir. Andy Ruiz se levantó y puso en malas condiciones a Joshua para mandarlo al suelo con su brutal derecha en par de ocasiones.
La campana había salvado al entonces campeón y la sorpresa seguía. Ruiz envió dos veces a la lona al británico, ambas en el séptimo asalto que obligaron al réferi intervenir y detener el combate.
El mexicano Ruiz hizo historia esa noche al ser el primer boxeador de raíces mexicanas en convertirse campeón en la división de los Completos.
Ese triunfo lo puso en la élite del boxeo. Se llevó una bolsa millonaria y conoció al presidente de México, Andrés Manuel López Obrador.
Las decisiones que vinieron después no fueron las mejores para el mexicano que firmó la revancha y tras no prepararse de la mejor manera, cedió sus títulos el 7 de diciembre en Arabia Saudita.
Fuertemente criticado, el destino de Ruiz cambió después de la derrota. Dejó de trabajar junto a Manny Robles, el entrenador que lo llevó a ganar el título mundial y en días pasados formalizó su nuevo equipo de trabajo con los hermanos Reynoso, quienes han llevado la carrera de Saúl “Canelo” Álvarez.
