Por ser parte de un proceso productivo similar al de un cultivo de alimentos, el adquirir un pino de Navidad natural no contribuye a la deforestación de bosques, ya que estos provienen de plantaciones forestales certificadas.
Al participar en un foro virtual producción sustentable de árboles de Navidad, Ramón Burciaga Verduzco, gerente en plantaciones forestales comerciales de la Comisión Nacional Forestal (Conafor), refirió que estos son un elemento tradicional de las fechas en nuestra cultura occidental y que su consumo está asociado con motivo de las fechas decembrinas.
El ingeniero agrónomo explicó que los árboles de navidad naturales son parte de un proceso productivo muy cuidado por las autoridades forestales.
“La gente piensa que los árboles de navidad provienen directamente del bosque es decir, se va al bosque natural, se cortan los árboles jóvenes para usarlos como árboles de navidad; esto no es cierto”.
También negó que los árboles que se venden correspondan a las puntas de los árboles que serían utilizados para madera.
Como parte de los beneficios ambientales del consumo de árboles naturales, destacó que estos claramente son biodegradables, contrario a los artificiales que tardan años en descomponerse, sumado a que estos últimos generan una huella ecológica mucho más impactante que los naturales.
En cambio, los de plástico, por su origen es imposible reintegrarse al medio ambiente y generan mucha contaminación durante su producción, transporte y desecho.
Otros de los beneficios ambientales es que las superficies que se utilizan para su producción se mantienen con cobertura forestal, por lo que esto permite que se conserven los suelos.
Una vez concluido el uso del pino navideño, estos se pueden reciclar para producir abono orgánico o sustrato para producir más árboles, lo cual genera un menor impacto en el ambiente que los de plástico.
Entre los beneficios económicos del consumo de árboles naturales, es que su producción genera empleo permanente en las comunidades forestales, por lo que contribuyen a reactivar la economía en áreas rurales y ayudan a disminuir el déficit de la balanza comercial forestal al sustituir las importaciones.
De acuerdo con registros oficiales de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y la misma Conafor, en los últimos años, en México se consumen 1 millón de árboles de navidad, de los cuales 45% se producen en México y el resto son importados.
Comentó que la Conafor ha apoyado en el establecimiento de 3 mil hectáreas de plantaciones comerciales de árboles de navidad, mismos que en su mayoría son producidos en el área metropolitana de México.
