El coordinador de la Comisión de Asuntos Fronterizos del 23 Ayuntamiento de Mexicali, Héctor Ibarra Calvo, manifestó que la federación no escucha a los mexicalenses ni da información referente a la instalación del albergue para migrantes, incluso, hasta pareciera que no toma en cuenta al gobierno municipal.
El delegado del gobierno federal en Baja California, Alejandro Ruiz Uribe, confirmó a LA VOZ DE LA FRONTERA, que a mediados de este mes podría quedar instalado el albergue para migrantes centroamericanos en Mexicali, lo que ha generado controversia en vecinos de la Calle 11.
El edil comentó que el delegado ha mencionado que la gente ha sobre reaccionado a la instalación del albergue, y a la manipulación de la información, sin embargo, todo esto se debe a la falta de información precisa y oportuna por parte del gobierno federal.
“El gobierno federal no ha tenido a la apertura para dialogar con los ciudadanos, y estamos hablando de ciudadanos que necesitan tener un canal de comunicación, saber cómo va a ser el albergue, qué características tiene, qué medios de contención va a tener.
“Si va a albergar niños, familias, mujeres, entonces, sí es necesario un albergue para migrantes, pero en todas partes va a haber una reacción –eso lo sabemos-, pero aquí el detalle es cómo lo socializas, cómo te acercas a la comunidad, el obligado es el gobierno”.
Mencionó que la última información que se dio a través de la presidenta municipal, Marina del Pilar Ávila Olmeda, es que no había información con el Ayuntamiento, en particular en lo que respecta a usos de suelo y licencias de construcción.
Ibarra Calvo aclaró que a pesar de que el albergue se trata de un proyecto enteramente federal, el Ayuntamiento tiene injerencia en lo que respecta a la autorización de la licencia de uso de suelo y de protección civil, en caso de alguna contingencia, y si el albergue puede dar seguridad a las personas que se encuentren ahí adentro.
“Más que ignorar a las autoridades municipales, están ignorando a Mexicali entero, eso es lo problemático, es un tema que se pudo haber desactivado desde un principio, con información, con socialización, con diálogo, con plática, con apertura, pero tenemos meses y la ciudadanía sigue preguntándose ¿qué pasa?”.