Tradicionalmente ubicados en el sitio donde se encontraba el antiguo astillero de San Felipe, los barcos encallados podrán desaparecer de no poder ser empleados para algún desarrollo turístico, luego de no adaptarlos al plan de desarrollo de imagen urbana en el puerto. En el antiguo astillero, ubicado a un costado del malecón, se construían enormes barcos, de una manera rústica y tradicional.
Por el crecimiento que tuvo la demarcación urbana del puerto, se debió de cambiar el sitio; anteriormente éste funcionaba con la marea, los barcos eran construidos y arreglados para cada temporada, actualmente deben hacerlo en el recinto portuario. “Hemos hablado con la capitanía de puerto con la finalidad de recuperarlos para un atractivo turístico como sería un restaurante o algún desarrollo, sin embargo, si no podemos hacerlo, los vamos a tener que desaparecer”, señaló el gerente del Cotuco en San Felipe, Rubén de la Peña.
De acuerdo al seguimiento que ha estado realizando el Comité de Turismo y Convenciones de San Felipe, sería lo más indicado debido al proyecto de mejoramiento de imagen urbana que actualmente están desarrollando. Las embarcaciones que actualmente se encuentran encalladas pertenecieron a la cooperativa Alberto Oviedo Mota, sin embargo, en el sitio laboraban las siete que trabajaban en las construcciones de barcos. “Se planeaba utilizarlos como un arrecife artificial, hundirlos y ampliar la red de tres arrecifes que tenemos, sin embargo, se presentaron una serie de trabas que no pudimos solventar y uno de ellos se tuvo que destruir para el muelle del recinto portuario”. Está habitada Las embarcaciones aún llaman la atención de los miles de turistas que visitan el puerto durante el período vacacional de Semana Santa, al aproximarse muchos toman fotografías y se asombran con el trabajo rústico con el que fueron construidas. Al interior del barco “Tampico” se dice es habitado por personas que carecen de hogar o un modo honesto de vivir, entre pandilleros y malvivientes conocidos del puerto.