Tijuana.- La explotación del litio en México ha despertado el interés luego de que se anunciara el hallazgo del supuesto yacimiento más grande del mundo en el país.
No obstante, todavía a la fecha existen muchos mitos alrededor del mineral y su impacto que tendrá en la economía mexicana durante los próximos años, dado el “boom” de los autos eléctricos a nivel global.
¿QUÉ ES EL LITIO?
La Secretaría de Economía define el litio como el elemento metálico, blanco-plateado, y químicamente reactivo; es el más ligero en peso de todos los metales y de bajo punto de fusión.
La dependencia federal expone que se encuentra presente en una amplia gama de minerales (aproximadamente 145 especies mineralógicas); sin embargo, sólo algunos poseen valor económico, siendo los principales: espodumena, ambligonita, lepidolita y petalita.
Este elemento se encuentra presente tanto en pegmatitas, como en salmueras, pozos petrolíferos, campos geotérmicos, arcillas e, incluso, en los océanos. En la actualidad, sólo dos procesos de obtención han demostrado ser económicamente factibles: a) salmueras y b) pegmatitas.
De acuerdo a la Secretaría de Economía, en Baja California la empresa Pan American Lithium estudia el reprocesamiento de una salmuera residual, producto de la operación de la planta de generación geotérmica de Cerro Prieto, perteneciente a la Comisión Federal de Electricidad.
EL FUTURO Y EL PRESENTE
El investigador del Colegio de la Frontera Norte (Colef), Rigoberto García Ochoa, señaló que diversos estudios han mostrado que en Baja California habría dos o tres puntos de manifestaciones de litio en la entidad, por el área de Mexicali, los cuales abrirían la oportunidad de explotación del mineral en la región.
El académico perteneciente al Departamento de Estudios Urbanos y del Medio Ambiente del Colef, indicó que los estados con mayor tradición minera en México, son Zacatecas y Sonora, no obstante, en Baja California habría un potencial importante en el desarrollo de una industria alrededor de la explotación del litio, dada su vecindad con Estados Unidos.
“El proceso de industrialización que vaya acompañando con ciencia y tecnología. Ahí va el desarrollo del país. Una mayor ganancia y mejores resultados para el desarrollo regional es cuando se desarrolla la industria. Es una buena oportunidad para empezar en la estrategia de desarrollo y crecer, con la industria y hacerlo nosotros. El litio es una gran oportunidad”, comentó.
El especialista aclaró que México no cuenta con el yacimiento de litio como se anunció en un momento, pues se decía que era de 243 millones toneladas, cuando en realidad eso corresponde a arcilla y solo el .85 toneladas, podría convertirse en litio.
“No es nada despreciable y es buena cantidad. No sabemos cómo va a empezar a trabajar, porque se requiere de una tecnología muy potente y poderosa para explotarlo y es difícil el proceso pero ya existe la tecnología para hacerlo”, comentó.
García Ochoa, dijo que dos de los yacimientos de mayor potencial en el país están en manos de una empresa canadiense y una china, no obstante, existen manifestaciones del mineral en otras partes de México, que se tiene que definir si los explota el gobierno mexicano o se entrega a privados, aunque con condiciones favorables para la nación.
“México no tiene la tecnología para buscar el litio, lo que se debería hacer es concesionar y crear un esquema de pago de impuesto para que paguen lo que tengan que pagar. Con ese impuesto se podría desarrollar un proyecto de ciencia y tecnología para desarrollar patentes”, explicó.
Mencionó que el litio cobrará gran relevancia en los próximos años, debido a su uso en pilas de autos eléctricos y en paneles solares, entre otros productos que marcará la tecnología de la siguiente época.
“Los autos eléctricos son el futuro y es un gran campo en México para participar en el mercado mundial de baterías. Tenemos el cliente para suministrar las baterías que son Estados Unidos”, concluyó.
