Por los altos niveles de inflación que se han registrado en Mexicali durante el último año, cada vez más los consumidores han optado por comprar unos cuantos pesos de tortillas, ya que en promedio el precio del kilogramo oscila entre los 24 y 25 pesos en las tortillerías, mientras que en supermercados se ofrece a alrededor de 15 pesos el kilogramo.
En esta ciudad fronteriza, durante la primera quincena de marzo el Instituto Nacional de Estadística y Geografía documentó una inflación anual del 13.60 por ciento en el caso de la tortilla de maíz, lo cual los consumidores y comerciantes han resentido.
Mireya Calderón, encargada de la tortillería Michoacana, refirió que derivado del alza a diferentes insumos como el gas, la gasolina y hasta de las materias primas, en este comercio tuvieron que actualizar los precios.
De igual manera el señor José Luis Franco, quien es encargado de la tortillería San Francisco, comentó que desde meses atrás se vieron obligados a incrementar el precio. Desde entonces ha observado que es más común que las personas compren lo equivalente a 3, 5 y 10 pesos de tortilla, ya que a los clientes no les alcanzan sus recursos para comprar un kilogramo.
Al inicio, dijo que los clientes se quejaron del alza, pero a la fecha, ya se han acostumbrado al precio, toda vez que en otras tortillerías se manejan precios similares.
En el mismo sentido opinó María del Rosario Rivas, quien es cajera de la tortillería Super Buena. En este comercio, desde el año pasado avisaron a sus clientes con un letrero que se incrementaría a 25 pesos el kilogramo de la tortilla, costo que mantienen vigente este marzo.
COMPRAN UNOS CUANTOS PESOS
A consecuencia de que los productos de la canasta básica mantienen costos muy altos, la señora Maribel López admitió que compra menos del kilogramo, por lo que al momento del sondeo, dijo que solo adquirió 10 pesos para alimentar a los cuatro integrantes de su familia, lo cual alcanzaría solo para el día.
“La verdad es que todo está muy caro, todo está subiendo, la tortilla, la carne, la gasolina, el gas y ahí entre todos (en casa) nos cooperamos”.
De igual manera, Rubén Félix, quien es integrante de una familia de ocho personas, comentó que todo está más caro, sin embargo, al tener que alimentar a tantas bocas, requiere de al menos dos kilogramos diarios de tortillas de maíz.
Es decir, considerando que el kilogramo de tortillas tiene un costo de 25 pesos, en su hogar gastan 350 pesos para alimentarse por siete días.
En tanto, la señora Ramona sólo compró 10 pesos de tortilla al momento de la entrevista, lo cual dijo, lo acompañaría con frijoles de la olla, para que le rinda.
EL PROBLEMA NO ES SOLO LA TORTILLA
El problema que sufren los consumidores no solo viene del precio de la tortilla, sino en general de todos los productos, a lo cual las autoridades no han sabido cómo contener la inflación, así lo consideró el economista Enrique Rovirosa.
Puntualizó que el Banco de México tiene la misión fundamental de controlar la inflación, no obstante el organismo no reaccionó a tiempo para poder contenerla, lo cual generó que persistan precios muy altos para los consumidores.
A los propietarios de las tortillerías no les quedó de otra más que actualizar sus precios a la alza, afirmó, puesto que en general tuvieron que asumir el incremento de las diferentes materias primas.
En cambio, en el caso de los supermercados, explicó que aunque estos mantengan precios más accesibles en el kilogramo de tortillerías al compararlos con los precios de las tortillerías pequeñas, en dichos comercios “recuperan” ganancias al vender otros productos con precios altos.
Para apoyar a los que menos tienen para consumir tortillas, comentó que se tendría que replicar esquemas como los de la Compañía Nacional de Subsistencias Populares (Conasupo), en los que se ofrecían precios accesibles para las personas con menor poder adquisitivo, opinó el experto.