Ante la incapacidad de un solo Ayuntamiento de satisfacer la demanda de servicios públicos de una población en crecimiento constante, así como de hacer frente a una de las zonas más peligrosas, la diputada local, Aracely Geraldo propuso la creación del octavo municipio del estado que será denominado “Nueva Tijuana”.
En la sesión plenaria realizada la tarde del jueves, la legisladora por Morena presentó dos iniciativas con tal fin, el primer referente a:
“Que se instruya a la Comisión de Gobernación, Legislación y Puntos Constitucionales, proceder al análisis y en caso de ser procedente, solventar las etapas establecidas en la Ley para que sea Municipio la demarcación territorial conocida como Zona Este, conformada por las Delegaciones Presa, Presa Este parte proporcional de la Otay Centenario y parte proporcional de la Subdelegación los Pinos.
La segunda iniciativa se refiere a una reforma al Artículo 26 de la Ley del Régimen Municipal, y se incluya a Nueva Tijuana como parte de los municipios del estado de Baja California.
En su exposición de motivos, la inicialista argumentó que los residentes de la conocida como Zona Este de Tijuana, han solicitado constituirse en un municipio debido a las condiciones tanto territoriales como de población, y ante la necesidad de acceder a los servicios públicos que debido a su lejanía.
Además de las condiciones socioeconómicas, población y territorio no han podido ser atendidos a lo largo del tiempo por las autoridades de Tijuana.
“La poca atención que se le da a las regiones más alejadas del casco de la ciudad obliga a tomar nuevos retos y nuevos rumbos. Solo en cuestión del gasto, para acceder al Palacio Municipal de Tijuana, se necesita más de un transporte público y un traslado de más de dos horas de camino.
“Esto conlleva a proponer un nuevo municipio autónomo y libre que acerque los servicios públicos a la sociedad más necesitada, que tenga poder de decisión y ejecución, y que eleve la calidad de vida de los vecinos de estas comunidades”.
La sola Delegación Presa Este es la más grande de Tijuana, con una superficie de 436 mil 554.72 hectáreas y es la más poblada con 269m mil 587 habitantes, contando con una capacidad económica sostenible para hacer frente a los retos que un nuevo municipio puede enfrentar.
Geraldo señaló que no hay que olvidar que es donde más problemática en materia de delincuencia existe, pues no hay un solo día en que no se cometa un delito de alto impacto, convirtiéndose en una zona insegura para los residentes de la misma.
Además, también es el lugar en donde existen más jóvenes con problemática en materia de adicciones, sin que exista un centro de rehabilitación gratuito para ellos y sus familiares; pues tristemente vemos que en las colonias de la zona este es muy fácil el comercio o compra de psicotrópicos o estupefacientes, sin que exista un control de la autoridad para detener esta lamentable práctica.
Abonando a lo anterior que los elementos en materia de seguridad pública para tan amplia población son rebasados, no existen suficientes elementos policiacos para controlar la alta violencia que se vive en la zona Este de la ciudad.
Según estimaciones de Market Data México, la Zona Este tiene un “output” económico estimado en 2 mil 200 millones de pesos anuales, de los cuales, 150 millones corresponde a ingresos generados por los hogares y unos 2 mil millones a ingresos de los 560 establecimientos que allí operan.
La Zona Este genera 3 mil millones de pesos en prediales, derechos y participaciones federales, lo que los hace más sustentable que San Quintin y San Felipe, aseveró Aracely Geraldo.
