Clientes y vecinos de Ernesto Montoya Flores, lo recuerdan como una persona amable y educada, que no merecía morir de la manera en que le fue arrebatada la vida, ya que todos trabajan muy duro para salir adelante, e incluso ponen sus esperanzas de que mejore la seguridad en el nuevo Gobierno.
En su edición de ayer, LA VOZ DE LA FRONTERA dio cuenta del atroz asesinato del que fue víctima Ernesto, la noche del viernes cuando en su negocio, fue sorprendido por al menos un sujeto que a golpes le quitó la vida.
El lugar de los hechos, un local de internet y videojuegos X One, con al menos 8 años de actividad, ubicado en la Plaza Fuentes, entre avenida Prado del Rey y calle Estela del fraccionamiento Villa Las Lomas, al Sur de la ciudad.
El centro comercial se ubica frente a un parque público, y a unos cuantos metros de la sede del Consejo Distrital 07 del Instituto Nacional Electoral (INE), donde se mantiene una fuerte vigilancia por parte del Ejército Mexicano. El negocio se encontraba cerrado, convive con una estética, un local que se ofrece en renta y un restaurante de comida china.
La vida en los alrededores sigue su curso, incluso se celebra una fiesta infantil en uno de los domicilios cercanos, la gente acude al mercado sobre ruedas nocturno del fin de semana, comentando el trágico suceso, pero la actividad no se detiene en ningún momento.
Mónica Contreras, residente del fraccionamiento, acudía de vez en cuando al negocio de internet, describió a Ernesto como una persona amable y servicial, incluso la ayudó pacientemente a descargar unos formatos cuando ella había olvidado sus lentes para leer.
Lamentó que ya no haya seguridad en ninguna parte, por lo que pone sus esperanzas en que con el próximo Gobierno cambien las cosas y regrese la tranquilidad. Una vecina que prefirió omitir su nombre. Coincidió en la amabilidad del hoy desaparecido, además, no se metía con nadie. Nunca supo que haya tenido problemas, por lo que le desconcierta lo sucedido, además, no han tenido problemas de inseguridad en esta área.
Comentó que en efecto, que el presunto culpable no trabajaba en el lugar, ya que quien ahí labora es una jovencita. También se quejó de que algunos medios cambian lo sucedido, ya que en ningún momento estuvo presente la familia a la hora del crimen, aseguró.
No merecía morir de esta manera, ya que era una persona muy trabajadora, que trataba de salir adelante con mucho esfuerzo y sacrificio, como para que alguien así nomás quiera llevarse lo que con tanto trabajo han logrado.