Diversos activistas sociales denunciaron la falta de atención, cuidado y mantenimiento de la “plazuela del ferrocarril” donde yace histórica máquina del tren y que se ha convertido en un ícono de Mexicali, Baja California.
Los estragos son evidentes en la plazuela, desde cercos cortados, grafiti, derrumbes, acumulación de basura, arboles secos, animales muertos, baños vandalizados y hasta el robo de piezas del mecanismo ferroviario, donde se destaca el hurto de la campana de bronce.
Para el doctor Jesús Granados Fernández integrante del comité zona centro y representante de la asociación “Mexicali por un México Mejor”, es la lamentable que las autoridades no volteen a ver uno de los lugares que alberga las raíces de la capital bajaliforniana y que debería permanecer como un espacio digno para los ciudadanos.
“Me estoy comprometiendo en ayudar a rehabilitar este lugar. Siempre he trabajado por Mexicali, su valle y San Felipe y ahora no será la excepción, ya que nuestro visión no es solo señalar, sino trabajar directamente en beneficio de las personas”, expresó Granados Fernández.
Ricardo Aguilera Raygoza, secretario general del sindicato de taxis de la Confederación de Trabajadores de México (CTM) comentó que el espacio público ubicado en las inmediaciones del ferrocarril se ha tratado de recuperar durante los últimos 30 años, donde hasta las promesas políticas no faltan en tiempos de campaña.
“El ferrocarril representó la oportunidad para que muchas familias pudieran emigrar desde el sur del país hacia Baja California. Por ello, este monumento histórico debe conservarse como muestra de la gratitud que hay a quienes fueron los primeros en llegar por esta vía”.
La máquina marcada con el número 2703 y que perteneció a Ferrocarriles Sonora-BC recorrió en sus años de servicio gran parte del país, movilizando carga y pasajeros, además de ser la protagonista de una película mexicana.
Destacan que jurídicamente el polígono de la plazuela no se encuentra en la concesión de Ferrocarriles Nacionales de México, pero tampoco legalmente como parte del ayuntamiento, lo que ha dificultado el actuar de las autoridades.
Para el señor Pedro Aguilera (Hermano de Ricardo) residente de la zona, la debacle del lugar se dio en tiempos del ex presidente de México Carlos Salinas de Gortari cuando ferrocarriles nacionales pasó a la iniciativa privada y el comercio del lugar desapareció.
Han sido los pensionados y jubilados las personas que más han intentado el rescate y conservación del lugar, pero lamentablemente muchos de ellos han perdido la vida, siendo cada vez menos los defensores de este símbolo.
La máquina de vapor número 2703 fue también protagonista de la película “Viento Negro” filmada en el Desierto de Altar, Sonora y donde se representa el trazo de las vías de conexión de Mexicali con el resto del país.