Ante la falta de pago de más de 300 tomas de agua, residentes del ejido Guanajuato se encuentran desde el 4 de octubre sin el servicio del vital líquido, lo que ha puesto en peligro la sanidad del conglomerado, así como la salud de los menores que cursan su educación básica en las escuelas de la zona.
Jesús Hernández, presidente del comité de agua potable del ejido, mencionó que al no contar ellos con un sistema pluvial, tienen una red hidráulica apoyada por pozos, los que trabajan con energía eléctrica proporcionada por la Comisión Federal de Electricidad (CFE), la cual al no recibir el pago correspondiente determinó suspender el servicio desde la semana pasada, afectando a los residentes.
“En tres meses la gente hizo caso omiso de pagar; de 400 tomas pagaron 90, estamos hablando de 91 mil pesos de deuda, cada uno debe de pagar 100 pesos al mes, tres pesos diarios”.
La irresponsabilidad por parte de vecinos del ejido, hizo que los que sí pagaron a tiempo, así como el preescolar, primaria y secundaria se quedaran sin el servicio, por lo cual y a pesar de contar con cisternas de agua, han tenido que suspender clases, ya que pueden correr los menores un riesgo sanitario.
“En lo que va de la semana, hemos tenido un día y medio de suspensión por motivos del agua, pues el tener a los niños y que vayan al baño sin agua, en condiciones que pueden ser insalubres, puede generar un riesgo sanitario”, señaló el director de la primaria “Gervacio Mendoza”, Óscar González Monteón.
Ejidatarios del Guanajuato, al ver la apremiante situación por la falta de agua, decidieron hacerle frente a la deuda y el jueves juntaron para liquidarla, por lo que al parecer estaría reconectándose el servicio el próximo lunes.
Mientras tanto los residentes que aun y con la falta de agua no hicieron el debido pago, seguirán sin contar con el vital líquido hasta que liquiden su cuenta, que en muchos casos data desde hace más de cinco años.