Las casas abandonadas, la falta de luz mercurial y de elementos de la Dirección de Seguridad Pública Municipal en el fraccionamiento Jazmines han provocado desde hace tiempo una creciente en los delitos como robo a transeúnte, a vivienda y comercios, siendo los ciudadanos de bien que diariamente se levantan de madrugada para ir a trabajar, quienes se han visto severamente perjudicados.
Alma Campa, residente de este complejo habitacional y líder de esta zona, señaló que el asalto a transeúnte es lo que más se ha presentado, siendo los trabajadores, gente honrada, así como mujeres y personas de la tercera edad los que se han visto perjudicados y hasta golpeados para despojarlos de sus pertenencias.
“Sí hay mucha inseguridad, demasiada, yo he reportado asaltos entre 7 y 7:15 de la mañana a gente que viene de trabajar del turno de la noche, los han asaltado en la entrada y los que van a trabajar en la madrugada de 4:30 a 5; me han golpeado mujeres de la tercera edad, ya tengo cuatro reportes”.
La vigilancia, y no policial, sino de los delincuentes que hasta esperan pacientemente a que los vecinos salgan a realizar sus labores diarias, ha dejado a varios de ellos sin parte de su patrimonio, pues los maleantes arrasan con todo lo que pueden de los domicilios.
“Muchas veces se esperan, te están vigilando a la hora que tú salgas para meterse a robar lo poco que se tiene; aquí hay mucho adulto mayor que todavía trabaja y se van con el pendiente de regresar y ya no hayan nada”.
De igual manera, las peleas constantes entre las bandas rivales de este fraccionamiento y los aledaños, como Progreso y Villas de Alarcón, han quitado la paz a los habitantes del lugar, que al no tener otro a donde ir, pues su patrimonio ahí se encuentra, han instaurado medidas de seguridad para protegerse.
“Niños de 12, 13 años andan en bandas ya, aquí en la noche ya no puedes andar, después de las 7 de la noche ya te salen piedras por donde quiera, porque se agarran, son alrededor de 30 jovencitos”.
Por su parte, Sergio Bojórquez vecino y encargado de una tienda de autoservicio, señaló que él ha sido una víctima constante de los amantes de los ajeno, quienes sin pena a plena luz del día se introducen a su establecimiento a sustraer mercancía, siendo el fin de semana el último atraco, en el cual hicieron un gran boquete en el techo para sustraer efectivo y mercancía variada.
“Se meten a la tienda y nunca nos han hecho nada, pero nos amenazan y salen con mercancía, con cerveza, cigarros; este fin de semana hicieron un boquete en el techo y se metieron en la noche, se llevaron dinero y mercancía, estamos haciendo el inventario para saber cuánto se llevaron”.
Balazos, palazos y pedradas son las que se han reportado al 911, denuncias que no han sido atendidas en oportunidad, por lo que vecinos de Jazmines hacen un llamado a las autoridades para atender este problema, que es grave y puede ponerse peor.
