Turista Cultural
El suicidio del autor japonés Ryunosuke Akutagawa, fue una consecuencia directa de la demencia de su madre. La posibilidad de que su locura fuera hereditaria lo persiguió durante toda su vida. Poco se sabía acerca de la depresión posparto o del carácter hereditario de las enfermedades mentales. Era 1927.
El suicidio del autor norteamericano Ernest Hemingway, fue una consecuencia directa de la depresión que sufría desde su primer divorcio, condición empeorada por un violento tratamiento de electroshocks. La “terapia” era tan destructiva que al final, el ganador del nobel de literatura, no recordaba ni su propio nombre. Era 1961.
Pensé en esto durante la apertura de la obra de teatro “Locas”, producida por la compañía mexicalense Tramoya Teatro, a partir del texto de José Pascual Abellán. El inicio denuncia las vejaciones sufridas por las víctimas de enfermedades mentales a través de la historia. Ni siquiera Baja California está exenta de esta historia, pues de 1931 a 1958 existió en La Rumorosa un hospital psiquiátrico que lo era sólo en nombre. En realidad era una cárcel para los entonces elementos indeseables de la sociedad, desde prostitutas, indigentes, homosexuales y por supuesto, personas que padecían de sus facultades mentales.
La trama de la obra gira alrededor de dos mujeres, Martirio y Gregoria (representadas por Itzayana Figueroa y Alejandra Becerra), quienes realizan una espera interminable en el consultorio de su terapeuta. El retraso del doctor las obliga a socializar, primero con torpeza y después con la excesiva familiaridad de dos extrañas que saben que jamás volverán a encontrarse. La conversación resultante es una exploración de los estigmas y estereotipos que todavía perduran sobre la salud mental, poniendo especial atención a la mujer, tanto aquella que obedece los roles tradicionales de ama de casa y madre de familia, así como aquella que los rechaza para ejercer una profesión. Estas temáticas tan difíciles fueron abordadas con gran levedad y humor, y es este respiro el que permitió que experimentáramos la amargura de las escenas más dramáticas al final.
Si el buen teatro es didáctico, como me lo explicó mi amigo y colega el dramaturgo Manuel Rojas hace unos años, "Locas" hace un excelente trabajo ilustrando el sufrimiento silencioso de la enfermedad mental y es un recordatorio de lo importante que es acercarse al teatro.
Para mayores informes sobre la actividad teatral en nuestra ciudad, sigan a las páginas Cartelera de Teatro Mexicali y Tramoya Teatro en Facebook. Para más reseñas como ésta, así como un análisis de los autores mencionados al inicio, visiten mi blog personal (dirección al pie de esta columna).
Facebook/Instagram/Twitter/YouTube: PinedaEscribe
E-mail: Pinedaescribe@gmail.com
Blog: www.pinedaescribe.com