El día que José Flores sufrió un accidente automovilístico, el primer diagnóstico era que jamás volvería a jugar futbol. Seis meses después volvió a pisar una cancha y ha encontrado una segunda oportunidad deportiva y de vida. “El Reaco”, como es conocido en el medio futbolístico en alusión al ejido Alberto Oviedo Mota, del que es originario, se ha convertido en un referente en el fútbol del valle de Mexicali.
Su incursión en el futbol de sala y su nivel en el fútbol asociado lo habían llevado a convertirse en una figura. Los éxitos llegaron pronto, hasta que un accidente de tránsito estuvo a punto de retirarlo de las canchas. “Al principio sufrí, porque no sabía qué iba a pasar, si volvería a jugar o no. No sabía realmente lo que me pasaría, fueron unos primeros meses en los que pensé que ya se acabaría todo, no tenía consuelo”.
Los primeros diagnósticos de médicos era que sería complicado que volviera a jugar futbol, pero el apoyo de familiares y amigos lo motivó para ilusionarse con regresar. “No solo yo lo pensé, mucha gente pensó que ya no jugaría. Regresé a las canchas, pero batallé mucho para lograrlo, hubo mucho apoyo de amigos futbolistas que estuvieron conmigo apoyándome. No tendría una cantidad de cuánta gente me ayudó porque fueron demasiados, apoyo tanto económico como anímico”.
La operación fue en Mexicali, tuvo que ser necesario hacer una cirugía en su rodilla derecha y otra más estética. Aún conserva unos tornillos que se le retirarán una vez que concluya el Torneo de Fútbol de los Barrios. Durante su recuperación, que fue de 6 meses, hubo una persona que se convirtió en pieza clave para el avance del “Reaco”. Fue Rodolfo Cholito” López quien lo recibió en Hermosillo para continuar con todo el proceso de rehabilitación.
“Fueron 6 meses de estar triste, si no hay futbol para mí, no hay tanta alegría, el futbol me llena mucho y me da un nivel muy fuerte de alegría”. Se perdió el Torneo de los Barrios del 2017, pero antes fue parte del equipo campeón en 2014 y le tocó ser parte del equipo subcampeón en 2015. Su regreso no solo fue deportivo, sino que fue parte de la plantilla que volvió a conquistar el torneo.
“Para mí fue increíble poder moverme como lo hacía antes, no pensé que quedara así porque algunos doctores opinaron que no sería igual, que no recuperaría al 100% y yo mismo me presionaba, no sabía que no iba regresar”.
El esfuerzo extra en la rehabilitación y extremar cuidados en su vida cotidiana lo han llevado a mantenerse sano en los últimos meses, incluso cada vez se siente con mayor confianza. “Soy el mismo ‘Reaco’ de cuando estaba bien, muchos dicen que no, solo aprendí a cuidarme, tengo más calma, pero puedo hacer lo mismo, mi recuperación fue del 95 al 100%, sí tengo nervios de golpearme de nuevo, pero no me preocupo tanto por eso. Creo en mí y confío en que las cosas van a estar bien”.
El campo “Ignacio ´Nacho´ Ornelas” del ejido Alberto Oviedo Mota ha sido testigo de sus grandes proezas y sus mejores movimientos. “Valoro más el futbol, valoro más a mi familia, valoro más todo”, dice. Hace unos días se acaba de coronar con su equipo en la Liga Regional del Sur y ahora apunta hacia el Torneo de los Barrios 2019.
