Con el fin de aumentar el desarrollo y crecimiento de los empleados para mejorar su calidad de vida, la diputada Daylín García Ruvalcaba, presentó iniciativa de reforma para otorgar estímulos fiscales a las empresas que brinden apoyo en la capacitación, educación continua, preparación y adiestramiento de los trabajadores.
Daylín García comentó que la propuesta reforma la Ley de Fomento a la Competitividad y Desarrollo Económico del Estado, a lo cual se pretende agregar otra consideración que incentive a las empresas que ofrecen beneficios a sus empleados, también de los que actualmente se contemplan, como lo son: el servicio de comedor, transporte público o privado y servicios de guardería.
“Además se realizan algunas precisiones que resultan eficientes para la promoción de las vocaciones del estado, impulsar el rehúso de materias primas, e incluir la adquisición de tecnologías dentro de los incentivos a la proveeduría”, agregó García Ruvalcaba.
La diputada manifestó que en Baja California se presenta una alta incidencia de abandono escolar en el nivel de preparatoria entre el primer y segundo año, reflejando que en la población en edad productiva no cuenta con las herramientas ni conocimientos suficientes para incorporarse al mercado laboral especializado o de mayor complejidad.
“Esta situación merma de manera significativa el desarrollo y crecimiento de los trabajadores, dado que frena las posibilidades de poder alcanzar una mejor calidad de vida, su desarrollo profesional y aspiraciones a un crecimiento personal”, comentó Daylín García.
Por lo cual señaló la legisladora que con estos indicadores resulta necesario generar acciones para incentivar tanto a los trabajadores para que se superen, así como a aquellas empresas que se ocupan del crecimiento de sus empleados, impulsándolos a ocupar mejores puestos dentro de la compañía.
“Este tipo de incentivos o beneficios constituyen lo que se conoce como “Salario Emocional”, que es el conjunto de estrategias, políticas o acciones que desarrollan las empresas para crear un ambiente laboral positivo entre los trabajadores, lo cual les hace sentir apreciados y valorados en reconocimiento a su esfuerzo y productividad”, explicó Daylín Ruvalcaba.
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