Una ola de migrantes venezolanos de más de 650 personas han llegado entre el jueves de la semana pasada y ayer a Baja California, deportados o retornados desde Estados Unidos; se proyecta que arriben al menos 200 más, informó Catalino Zavala Márquez.
El secretario general de gobierno comentó que el martes en la noche se registró un conato de atrincheramiento en las instalaciones del Instituto Nacional de Migración (INM) en Tijuana, donde se determinó mandar a 45 a Mexicali a bordo de dos camionetas.
Puntualizó que los trámites para determinar la situación migratoria y su libre tránsito por México, tarda entre 3 a 4 días.
“La política migratoria de México es de atenderlos”, comentó el secretario general de gobierno.
Por tal motivo, están proyectando junto con la Secretaría de Bienestar estatal, activar albergues temporales en Tijuana y, de ser necesario, en Mexicali.
Zavala Márquez afirmó que los venezolanos tienen la opción de pedir el asilo o refugio en México y les autorizan 30 días de estancia.
El flujo de venezolanos podría continuar, explicó Alejandro Ruiz Uribe, delegado federal en Baja California, ya que el acuerdo entre el gobierno de México y de Estados Unidos es recibir un máximo de 200 retornados por día.
“No sabemos en cuánto va a terminar la cifra, ni tiene límite de temporalidad”, precisó.
Pero, aseveró, hay compromiso federal de atender los albergues con todo lo necesario, desde alimentos hasta cobijas.
Sergio Tamay Quintero, activista y dirigente de Ángeles sin Fronteras, puntualizó que los venezolanos no quieren pedir el refugio o asilo porque en automático perderían el solicitado en Estados Unidos.
“Algunos venezolanos ya no traen dinero”, comentó.
También señaló que no quieren retornar a Venezuela, ni aceptar la ayuda de su presidente Nicolás Maduro que enviará aviones a la Ciudad de México para la repatriación.
