Tijuana.- México se vería afectado por la guerra comercial entre Estados Unidos y China a largo plazo, manifestó Alejandro Gómez Tamez, director General del Grupo Asesores en Economía y Administración Pública (GAEAP).
Advirtió que, de continuar este escenario, habrá un cambio en la dinámica internacional y se desacelerará el crecimiento económico con repercusiones a las exportaciones del país.
El experto asegura que, si las provocaciones comerciales del presidente estadounidense Donald Trump al país asiático se salen de control, afectará la operatividad de docenas de tratados comerciales negociados durante varias décadas.
Refirió que el discurso político del mandatario norteamericano ha sido que México se ha aprovechado de su relación comercial y que esto ha generado superávits comerciales como en 2017, cuando llegó a 71 mil 56 millones de dólares.
Sin embargo, en la práctica México se benefició por sus decisiones, debido a que está excluido momentáneamente de la lista de países a los que se impusieron aranceles en la importación de acero y aluminio.
Asimismo, ha trascendido que Estados Unidos plantea retirar de la mesa de negociación, del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), una de sus demandas, que 50% del valor de contenido de los automóviles sean de origen estadounidense y así el sector se beneficie con menos aranceles.
“Para muchos, este anuncio es muestra de que nuestro vecino del norte se ha dado cuenta de que no puede mantener tantos flancos de guerra abiertos en materia comercial, y que le conviene tener un bloque comercial sólido en Norteamérica para contrarrestar sus desequilibrios comerciales con Asia, y en especial con China”.
Dijo que la confrontación entre las dos economías más fuertes del mundo, Estados Unidos y China, también repercutirá en los mercados bursátiles, tasas de interés y tipo de cambio. Gómez Tamez refiere que el índice bursátil Dow Jones perdió más de mil 300 puntos en dos días, del 21 al 23 de marzo.
Por otro lado, rememora que durante las últimas dos semanas se han visto una serie de acciones contra China y varios países, por ejemplo, el evitar que adquieran empresas tecnológicas estadounidenses y restringir futuras inversiones. Esto con el objetivo de recuperar 60 (mmdd) a partir de la aplicación de aranceles de 25% a los productos chinos “por un monto equivalente al daño ocasionado a la economía estadounidense”.
Expuso que la meta de Donald Trump es disminuir 25% el déficit comercial de su país con China para llegar a 100 mil millones de dólares. Ante esto, la reacción de China fue imponer aranceles a Estados Unidos por un monto de tres mil millones de dólares en productos como frutas frescas, nueces, vino, puerco, aluminio reciclado y tubería de acero.
El especialista señala además que China posee más de 1.17 billones de dólares de bonos del Tesoro de Estados Unidos y con ello será amplia la capacidad de negociación. En conclusión, la Secretaría de Economía, dijo, debe ejecutar un plan a largo plazo que aproveche la situación o reducir el impacto negativo del enfrentamiento entre ambas naciones.
