Más de ocho empresas transportistas de Baja California estuvieron entre los afectados por los bloqueos y actos violentos del pasado 5 de enero en Culiacán, Sinaloa, derivados de la detención del presunto narcotraficante Ovidio Guzmán López, hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán.
Luciano Jiménez Laveaga, delegado de la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (Canacar) en Mexicali, confirmó las afectaciones a transportistas bajacalifornianos, quienes iban circulando por la zona al momento de los hechos.
“Uno de los transportistas estuvo a punto su camión de ser quemado, pararon seis camiones y quemaron dos, iban sobre los demás pero llegó la autoridad, entonces estos fenómenos pues los traemos muy a flor de piel, porque vemos que pasan en otros lugares”
El dirigente empresarial resaltó que todos los choferes sobrevivieron al evento, aunque algunos permanecieron horas retenidos sin alimentos, aunque sí se reportaron afectaciones económicas como saqueos y camiones que nunca llegaron a su destino.
Actualmente en Baja California la zona de La Rumorosa es considerada en “alerta amarilla” luego de que un transportista foráneo fuera perseguido y obligado a detenerse por un grupo de al menos seis personas, aunque el entrevistado dijo desconocer más detalles sobre el hecho.