La presencia de lluvias favorecerá las condiciones para la reproducción y circulación del mosquito Aedes-aegypti, transmisor del dengue, zi ka y chikungunya.
Néstor Saúl Hernández Milán, jefe del Departamento de Epidemiología, recordó que fue precisamente tras el paso del huracán “Odile” en el 2014 cuando Baja California enfrentó su primer brote de dengue, al Sur de la entidad.
Un año después la enfermedad se registró en Mexicali.
Contrario a lo que pudiera pensarse, el mosquito Aedes-Aegypti se desarrolla en aguas limpias, por lo que todos los artículos que acumulen agua en los patios como baldes, macetas, llantas o botellas se convierten en potenciales criaderos.
“Si ya tenemos ese antecedente es importante reconocer que pudiéramos llegar a tener la misma problemática”.
Al declararse en emergencia a Mexicali y San Felipe por la tormenta tropical “Rosa”, la Secretaría de Salud informó también que se instaló la mesa operativa de plan de contingencias, donde se reúnen instituciones públicas y privadas.
Ahí se podrían determinar la activación de cercos epidemiológicos, atender a lesionados y emitir recomendaciones a la población.
