El estado de salud del obispo de Mexicali, José Isidro Guerrero Macías sigue agravándose debido a las complicaciones del COVID-19.
A través de un comunicado la Diócesis de Mexicali confirmó que no ha habido la respuesta esperada al tratamiento y continúa conectado a ventilación mecánica.
El Arzobispo de Tijuana, Francisco Moreno Barrón y el secretario canciller de la Diócesis de Mexicali, Rogelio Izaguirre Miranda, se reunieron el lunes con el equipo médico que atiende a Guerrero Macías
“Si bien en las últimas horas la saturación de oxígeno y algunos otros parámetros se han mantenido estables, su respuesta al tratamiento no ha sido la que se esperaba, continúa intubado y se le considera un paciente muy grave”.
La Diócesis de Mexicali llamó a una intensa campaña de oración por el obispo José Isidro Guerrero Macías de 69 años.