La creación del Fondo de Pensiones para el Bienestar no beneficia a los trabajadores, solo se basa en la confiscación de dinero que no le pertenece al estado, manifestó el analista económico Enrique Rovirosa Miramontes.
A iniciativa del presidente Andrés Manuel López Obrador, el Congreso de la Unión aprobó recientemente la creación del Fondo de Pensiones para el Bienestar, en la que se pretende que los jubilados obtengan como pago de su pensión, el 100 % del último salario que recibían como trabajadores activos, y se pretende aplicar desde el 1 de julio.
El citado fondo se ha fondeado por la incautación de las cuentas de las Afores (Administradora de Fondos para el Retiro) de personas mayores de 70 años y que se encuentran inactivas, cantidad que asciende a alrededor de 40 mil millones de pesos y que podrán ser reclamables por las personas afectadas.
El maestro en Economía señaló que, aunque pudiera parecer una reforma muy loable, en realidad no busca un beneficio real para el trabajador.
Observó que en la ley no hay nada que obligue al pago del 100 % de la jubilación al trabajador, ni que esta se empiece a aplicar a partir del 1 de julio.
Si el gobierno realmente hubiera querido ayudar a los trabajadores, primeramente, hubiera obligado a las Afores a localizar a los beneficiarios de las cuentas que se encuentran inactivas para devolverles su dinero.
Se habla que esto beneficiará a los trabajadores que se vayan a jubilar, pero ¿qué pasa con aquellas personas que ya se encuentran jubiladas?, ¿cómo las van a beneficiar?
En su caso personal, que es jubilado con más de 70 años, no sabe ante quién va a reclamar su dinero, ni cuánto van a tardar en que le devuelvan su dinero, situación muy diferente a lo que pasa con las Afores, que sabe perfectamente qué hacer y a donde acudir, aunque a lo mejor tarden algunos días.
Entre las observaciones que tiene, es que es otra ley legislada al vapor, vía “fast track”, por lo que se debe definir cuándo y en qué casos podría legislarse de esta manera, como pudiera ser en los casos de desastre, ya que lo han hecho de manera muy autoritaria.
Es por ello por lo que todo esto se debe discutir en la Cámara de Diputados como en la de Senadores, definir mecanismos y despejar dudas, señaló.
La segunda observación que tiene es que no siempre se puede dar todo lo que se pide, si bien, se pretende pagar la jubilación o la pensión al 100 %, para esto se requiere de una fortaleza económica que México no tiene en estos momentos.
Como tercera observación es que buscar fondos por medio de la expropiación o confiscación de las cuestas inactivas de las Afores, es algo que no es correcto, ya que no se trata de dinero del gobierno sino de los trabajadores, está mal, además, se dice que es anticonstitucional, aseveró Rovirosa Miramontes.
