/ lunes 2 de julio de 2018

AMLO convierte en realidad su viejo anhelo

Prisma


Si mal no recuerdo, cuando Vicente Fox fue electo Presidente de México se atrevió a vaticinar que el día siguiente de su elección el cielo de nuestro país “sería de un color azul”.

Si consideramos que el domingo pasado, por decisión unánime de millones de mexicanos Andrés Manuel López Obrador resultó triunfador en la justa electoral presidencial, ayer lunes el cielo debió ser de color morado, el color del Partido Morena. Menos mal que el futuro mandatario se abstuvo de mencionar tales sandeces.

Lo que sí es un hecho incontrovertible es que el político tabasqueño, pensando tal vez que “el que persevera alcanza”, convirtió en realidad su añejo anhelo: Ser Presidente de México para promover el cambio que miles de ciudadanos reclaman. Demostró además que como reza el viejo refrán “la tercera es la vencida”, luego de haber luchado por su causa contra toda clase de vientos y mareas.

El candidato que utilizó el lema “Juntos Haremos Historia”, asumirá en diciembre la Presidencia de nuestro país con la legitimidad -hay que decirlo- de haber ganado los comicios con el 53% de la votación y con 31 puntos de ventaja sobre su más cercano aspirante, en base a información difundida por Lorenzo Córdova, presidente del Instituto Nacional Electoral.

Fue tan amplia la ventaja que ni sumando la votación obtenida por Ricardo Anaya y José Antonio Meade, alcanzaría para superarla, ya que les faltarían 14.7 puntos. De ese tamaño fue la diferencia.

De acuerdo con esas cifras, López Obrador -que forjó su carrera política participando en movimientos a favor de causas sociales que le costaron críticas severas de sus enemigos políticos- sería el primer Presidente que haya registrado mayor votación en una elección presidencial.

En su primer discurso como candidato triunfante en el proceso electoral -cuyo contenido mantenía expectantes a miles de ciudadanos-, AMLO fue claro y preciso: “El nuevo proyecto de nación buscará establecer una auténtica democracia. No apostamos a construir una dictadura abierta o encubierta. Los cambios serán profundos, pero se darán con apego al orden legal establecido”.

En su mensaje destacó el llamado que hizo a “la reconciliación de todos los mexicanos”, así como el anuncio que el proceso de transición a su gobierno se llevará a cabo en un marco de orden para evitar crisis o desencuentros entre los funcionarios que entran y los que saldrán.

Del resultado de la elección en BC, funcionarios del PRI y el PAN se abstuvieron de proporcionar información por falta de datos. Seguiremos esperando.


Prisma


Si mal no recuerdo, cuando Vicente Fox fue electo Presidente de México se atrevió a vaticinar que el día siguiente de su elección el cielo de nuestro país “sería de un color azul”.

Si consideramos que el domingo pasado, por decisión unánime de millones de mexicanos Andrés Manuel López Obrador resultó triunfador en la justa electoral presidencial, ayer lunes el cielo debió ser de color morado, el color del Partido Morena. Menos mal que el futuro mandatario se abstuvo de mencionar tales sandeces.

Lo que sí es un hecho incontrovertible es que el político tabasqueño, pensando tal vez que “el que persevera alcanza”, convirtió en realidad su añejo anhelo: Ser Presidente de México para promover el cambio que miles de ciudadanos reclaman. Demostró además que como reza el viejo refrán “la tercera es la vencida”, luego de haber luchado por su causa contra toda clase de vientos y mareas.

El candidato que utilizó el lema “Juntos Haremos Historia”, asumirá en diciembre la Presidencia de nuestro país con la legitimidad -hay que decirlo- de haber ganado los comicios con el 53% de la votación y con 31 puntos de ventaja sobre su más cercano aspirante, en base a información difundida por Lorenzo Córdova, presidente del Instituto Nacional Electoral.

Fue tan amplia la ventaja que ni sumando la votación obtenida por Ricardo Anaya y José Antonio Meade, alcanzaría para superarla, ya que les faltarían 14.7 puntos. De ese tamaño fue la diferencia.

De acuerdo con esas cifras, López Obrador -que forjó su carrera política participando en movimientos a favor de causas sociales que le costaron críticas severas de sus enemigos políticos- sería el primer Presidente que haya registrado mayor votación en una elección presidencial.

En su primer discurso como candidato triunfante en el proceso electoral -cuyo contenido mantenía expectantes a miles de ciudadanos-, AMLO fue claro y preciso: “El nuevo proyecto de nación buscará establecer una auténtica democracia. No apostamos a construir una dictadura abierta o encubierta. Los cambios serán profundos, pero se darán con apego al orden legal establecido”.

En su mensaje destacó el llamado que hizo a “la reconciliación de todos los mexicanos”, así como el anuncio que el proceso de transición a su gobierno se llevará a cabo en un marco de orden para evitar crisis o desencuentros entre los funcionarios que entran y los que saldrán.

Del resultado de la elección en BC, funcionarios del PRI y el PAN se abstuvieron de proporcionar información por falta de datos. Seguiremos esperando.