Turista Cultural

Jackie Gleason afirmó sobre la comedia: "Es la forma de arte más inmediata. Las risas son la crítica".

El pasado 17 y 18 de mayo en el Café Literario, Tramoya Teatro exploró este concepto con "Ni princesas, ni esclavas", un espectáculo cabaret escrito por Humberto Robles y dirigido por Iliana Becerra.

El argumento es simple: Tres arquetipos femeninos representan monólogos explorando sus problemáticas y dificultades. El espectáculo abre con “Lupita”, una ama de casa que presume con impactante aplomo la normalización de la violencia en su hogar; continuamos con “Thelma María”, una sexoservidora que exhibe la pasión que muchas mujeres reprimen; finalmente, “Patricia”, una mujer inteligente e independiente, se lamenta de la satisfacción emocional y sexual que abandonó tras perseguir una carrera profesional.

"Ni princesas, ni esclavas", mantuvo la línea cómica. Bárbara Bernal (“Lupita”) se anotó una victoria al lograr que nos riéramos sobre cómo su personaje sufrió otra golpiza de su marido; Ericka Gauthereau (“Patricia”) similarmente expuso su sufrimiento en aras de la liberación femenina. Iliana Becerra (“Thelma María”) fue la intermediaria; con sus chuscas participaciones y dones de improvisación logró limpiarnos cualquier mal sabor de boca.

Ésta fue una victoria tanto para Tramoya Teatro como para el teatro mexicalense en general, pues llenaron el Café Literario pese al concierto "GranDiosas" que ocurría simultáneamente en el Teatro del Estado. Esto se debe, en gran parte, según me lo comunica la directora, gracias a las recomendaciones que han ido de boca en boca. Sigan a Tramoya Teatro en Facebook para estar al tanto de próximas presentaciones de esta obra u otros proyectos.

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