El lanzamiento de un nuevo Final Fantasy siempre detiene al mundo del gaming y es que la legendaria saga de Square Enix es conocida por reinventarse en cada entrega para explorar nuevos estilos de juego o nuevos géneros, Final Fantasy XVI no es la excepción y se ha convertido en un título de acción que pone alta la vara para todo aquel que intente hacer algo de este tipo.
Desde hoy, Final Fantasy XVI es el nuevo estándar en juegos AAA, con desbordante calidad en todos los departamentos, el mejor gameplay de acción del mercado, una trama digna de HBO y la sensación constante de que estás experimentando algo épico, sólo posible en este medio.
Si nunca le has querido entrar a un Final Fantasy por tratarse de un RPG con combate por turnos, puedes desechar esa idea en este caso, pues este lanzamiento cuenta con uno de los sistemas de pelea más divertidos, vistosos y profundos que han llegado a nuestros controles.
La batalla ha sido diseñada por Ryota Suzuki de Devil May Cry, que considera este como su mejor trabajo y con razón, pues se trata de un hack and slash rápido e intuitivo que te permite mezclar la gran variedad de poderes que desbloquearás a lo largo del juego para conseguir combos espectaculares y perfeccionar tu propio estilo.
Todo esto respaldado por una calidad visual y auditiva sin precedentes, es casi imposible poner en palabras la belleza que es el combate de FFXVI en movimiento, lleno de coloridas animaciones y un montón de partículas llenando tu pantalla, sacándole todo el jugo posible a la PlayStation 5.
Pero no sólo el combate es visualmente hermoso, también todo lo demás, desde los modelos de los personajes principales, hasta las diversas áreas semi abiertas llenas de detalle, con secuencias de acción increíbles que nunca otro juego del género había intentado de esta manera y largas cinemáticas actuadas a la perfección para engancharnos a lo que está sucediendo en pantalla.
La trama nos ubica en la tierra de Valisthea, la cual posee como su máximo tesoro los “Cristales Madre” que son protegidos por cada uno de los cinco reinos que la habitan, pero que se encuentran en riesgo de sucumbir ante una emergente plaga oscura, la cual provoca roces entre sus líderes para llevarlos al borde de la guerra.
Mientras tanto, controlamos a Clive Rosfield, un “Dominante” que posee la habilidad de utilizar los poderes elementales de los “Eikons”, criaturas gigantes y poderosas que para algunos son una bendición y en en el caso de Clive, una maldición, pues ha perdido a su familia tras el brutal ataque de una de estas bestias y su camino lo llevará a buscar venganza pero también a encontrarse a sí mismo.
El productor del juego, Naoki Yoshida y el director, Hiroshi Takai; han mencionado que Game of Thrones es una de las grandes inspiraciones para FFXVI y han logrado capturar en esta trama la tensión política intensa, sin dejar de ser un mundo fantástico, además de que toma temas complicados como la religion o la esclavitud, sin miedo a los subtextos sexuales o la violencia, algo que previamente era inpensable para un Final Fantasy.
Otro de los cambios importantes es que esta se trata de una experiencia concisa y lineal, que no sucede en un mundo abierto, si no en secciones grandes de terreno interconectadas entre sí por caminos estrechos; además de que el grind es básicamente innecesario y a pesar de que hay una buena cantidad de misiones secundarias y cacerías, es posible simplemente avanzar en la trama para terminar el juego en alrededor de 30 horas.
Final Fantasy XVI es la experiencia definitiva en el rango de los juegos AAA, si buscas una excusa para mostrar todo el potencial que tu PlayStation 5 puede alcanzar, esta es, con un combate exquisito y una historia que te mantendrá intrigado, además de poseer todo el encanto recurrente de la saga y una musicalización orquestal exquisita. Un paquete completo que con el más alto nivel nos demuestra de lo que el gaming es capaz.
CALIFICACIÓN
10/10
Uno de los mejores títulos de acción de los últimos años y uno de los mejores de la franquicia, imperdible si posees un PlayStation 5 o tal vez la razón para al fin obtener uno.