El futuro de la industria automotriz en el TLCAN representa un gran reto

Con o sin acuerdo, México seguirá exportando aguacate a Estados Unidos: APEAM

Reuters

  · jueves 10 de mayo de 2018

Foto: Cortesía

Las conversaciones para renovar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) tuvieron pocos avances, Estados Unidos y México buscaron franquear sus diferencias sobre elementos clave en el tema automotriz, dijeron tres fuentes cercanas a la situación.

Los socios discuten la exigencia de Estados Unidos de que un porcentaje de la producción sea realizada en las zonas de la región donde los salarios son más altos, un claro golpe a México, donde los sueldos son menores, aseguraron las fuentes.

Las dos naciones también discuten la petición de Estados Unidos de elevar el contenido de los vehículos producido en Norteamérica.

"Hasta que eso se resuelva de una manera u otra, no hay muchas posibilidades de un acuerdo", dijo una de las fuentes.

El futuro de la industria automotriz de la región en un TLCAN renegociado es, por ahora, uno de los mayores retos que enfrentan Robert Lighthizer, Chrysta Freeland e Ildefonso Guajardo, líderes comerciales de las negociaciones.

Freeland se reunió ayer con Lighthizer y rechazó responder consultas sobre la lentitud de las negociaciones, diciendo que Canadá se tomará el tiempo necesario para alcanzar un buen acuerdo.

Seguirá exportación de aguacate a EU

Por otro lado, Ramón Paz Vega, asesor estratégico de la Asociación de Productores y Empacadores Exportadores de Aguacate de México (APEAM) señaló que el comercio de aguacates entre México y Estados Unidos continuará con o sin TLCAN, incluso con una posible aplicación de un arancel.

Señaló que a final de cuentas, el eventual impuesto lo va a pagar el consumidor americano. "No hay ningún otro país que pueda surtir a lo largo de todo el año y en los volúmenes que se requiere. Al no haber un proveedor sustituto, estamos cautelosamente optimistas de que el comercio continuará con o sin tratado”, dijo.

Expuso que 52% de los hogares en Estados Unidos consume este producto, con un aumento per capita que pasó de 500 gramos a tres kilogramos y medio.

Aún discuten el tema de que un porcentaje de la producción provenga de zonas donde los salarios son altos