Hondureños están firmes tras el sueño

Dos familias están huyendo de la pobreza y la inseguridad y buscan darle lo mejor a sus hijos

Mariela Tapia

  · sábado 9 de febrero de 2019

En esta travesía, el hombre consideró que los más difícil de tolerar han sido las enfermedades que ha tenido su bebé de 8 meses./ Sergio Caro

Largas caminatas, frío y enfermedades es lo que ha tenido que pasar la familia de Melvin Osorio para llegar a Estados Unidos, siendo Mexicali su última escala para ingresar al vecino país.

Él viajó desde Honduras con su esposa Ana Betty y sus dos hijos, la pequeña Litzy, de 7 años y Melvinde 8 meses, así como con la sobrina de su esposa, Rosa Elena, su esposo, Germán y sus respectivos hijos, Emerson, Yorly y Rosa Angélica.

En esta travesía, el hombre consideró que los más difícil de tolerar han sido las enfermedades que ha tenido su bebé de 8 meses, ya que es el más vulnerable.

Los migrantes, ya con la mira puesta en Tijuana, le hacían señas a todo vehículo en el que pudieran subir para tener el ansiado “raite”. / Sergio Caro

Ahorita solo es del pecho, pero anteriormente se había enfermado del estómago y de los ojos.

Afortunadamente, dijo su esposa, en el albergue Alfa y Omega los han tratado muy bien; les han dado un lugar donde dormir, comida y hasta leche en polvo para el bebé.

No traíamos nada y nos recibieron muy bien, gracias a Dios.

Todos ellos arribaron a México desde el 27 de enero y a Mexicali el 7 de febrero, en la mayoría del trayecto, caminando.

Melvin comentó que las dos familias están huyendo de la pobreza y la inseguridad, toda vez que como cualquier padre, busca darle lo mejor a sus hijos.

Hay mucha delincuencia y los niños miran todo, eso es lo que no quiero… y la pobreza aparte.

Una vez que logre ingresar a Estados Unidos, aspira contactarse con unos familiares que tiene en California o bien, llegar con otros parientes en Iowa.