Durante las vacaciones escolares se incrementan las posibilidades de accidentes en el hogar, debido a que los niños y las niñas permanecen más tiempo en casa, por lo que es necesario que los padres y madres de familia los mantengan vigilados para evitar que estos sucedan.
El Gobierno de Sonora a través del Consejo Estatal para la Prevención de Accidentes, (COEPRA) llamó a la población sonorense a evitar que los menores jueguen en la cocina y lanzó un exhorto a los padres y tutores a guardar medicamentos y sustancias químicas bajo llave o en repisas altas, así como en sus envases originales.
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También sugiere evitar tener objetos en el suelo con los que puede ser fácil tropezar, a dejar bien tapadas pilas y albercas, vigilar a los niños cuando jueguen en tinas, albercas o inflables y a mantener en buen estado los enchufes y taparlos si no se utilizan.
Coepra mediante el Centro Regulador de Urgencias Médicas (CRUM), atiende y coordina los traslados de lesionados en accidentes, los cuales son reportados a través de la línea de emergencia 9-1-1.
En este sentido, personal del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) advierte que los incidentes son más frecuentes en niños menores de 5 años por la falta de supervisión de sus padres o algún adulto.
Se indicó que las medidas preventivas están directamente relacionadas con la edad del infante, por lo que es fundamental tomar precauciones diferentes según sea el caso.
Médicos del IMSS explican que cuando los niños tienen un año de edad ya hacen pinza con los dedos permitiéndole llevarse objetos a la boca, por lo que hay que tener cuidado de las cosas que se dejan a su alcance. En esta edad es frecuente la ingesta y asfixia por cuerpos extraños.
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Poco más adelante, cuando empiezan a caminar, el ahogamiento en cubetas con agua es frecuente, provocando accidentes que en ocasiones son fatales, de ahí que por ningún motivo se deben descuidar recipientes abiertos con líquidos.
Los menores entre 3 y 5 años son más proclives a la intoxicación por medicamentos; seguido por la ingesta de productos de limpieza, insecticidas y combustibles. Esto genera lesiones como quemaduras en esófago o neumonías.