A pesar de que en muchas escuelas e instituciones ya se promueven hábitos para un mejor cuidado del agua, en Mexicali persiste la falta de intención y responsabilidad social para adoptar estos hábitos, consideró Isadora Clark Ordóñez, profesora investigadora de la Universidad Autónoma de Baja California (UABC) y representante de Coordinación de Gestión Ambiental.
En entrevista para LA VOZ DE LA FRONTERA, la académica reconoció que existe una falta de promoción para que la sociedad mexicalense logre este cambio de hábitos, pues en muchas ocasiones las personas no adoptarán este cambio a menos que lo haga una mayoría de la población.
“En nuestra vida cotidiana seguimos viendo que la gente riega banquetas, quizá para liberar un poco el calor o están haciendo limpieza, lava carros con la manguera, la gente abre la llave y deja correr el agua mientras se está enjabonando (…) nos ha faltado como más intención, como que todavía no estamos muy preocupados por estos temas”
Si bien es cierto que existen industrias que consumen grandes cantidades de agua, Clark Ordóñez puntualizó que muchas de ellas cuentan con procesos para el tratamiento y reutilización de agua.
En el caso de la población en general, por otra parte, se sigue mantenimiento la creencia de que sus acciones no tienen impacto en el uso del agua de la ciudad, situación que la investigadora asegura es opuesta a la realidad de Mexicali.
“Creemos que porque somos individuos y en mi casa yo veo mi recibo de agua y no es tan alto, creemos que no tenemos un impacto, pero estamos hablando de miles de ciudadanos, y no hay una responsabilidad social en ese sentido, y eso lo vemos con todo lo demás”
