Es necesario que se legisle contra la violencia vicaria en Baja California, y que la Gobernadora, Marina del Pilar Ávila Olmeda les conceda una audiencia al colectivo Madres Unidas Contra la Violencia Vicaria, ya que hay demasiados expedientes abiertos en los que no ven que haya justicia.
Lo anterior lo manifestó Paulina Gutiérrez, de la organización Unidos por el bienestar del menor y la familia, quien este viernes entregó un oficio al congreso del estado, así como a la oficina de la Gobernadora en los que plantea las citadas solicitudes.
También piden se constituya una comisión para el estudio y la discusión de la violencia vicaria familiar, en el estado de Baja California, expuso la activista, quien agrega, no es atendida por ninguna autoridad.
Explicó que la violencia vicaria es la que se ejerce contra los hijos, niñas, niños y adolescentes, por el daño que se pretende hacer a la madre, y se da casi siempre en un contexto de separación y de litigios interminables, y en el que se hace un enorme daño a los menores.
También puede ser cuando se daña a los menores de manera física, se llegan a los golpes, al feminicidio, al infanticidio, con tal de dañar a las madres.