Por cuestiones médicas y políticas, el gobernador del Estado y el Secretario de Salud consideran que los jubilados del magisterio deberían suspender la huelga de hambre con la que exigen el pago de sus finiquitos.

Desde el lunes los trabajadores de la educación iniciaron la protesta acusando a Jaime Bonilla Valdez de incumplir su compromiso con este gremio.

En lugar de ofrecer soluciones, durante su transmisión diaria vía facebook, el gobernador dijo que por el ambiente electoral no es el momento para este tipo de protestas.

“Decirles que no es el momento propicio porque es un momento electoral y se ve mal”.

Desde las oficinas de gobierno en Tijuana, el titular de la Secretaría de Salud, Alonso Óscar Pérez Rico, sugirió que la vida de los trabajadores está en riesgo ante una huelga de hambre.

“Si no tomas agua en tres días te mueres y si no ingieres alimento en menos de 30 días te mueres”.

Pérez Rico, encargado en este momento de la estrategia contra el Covid-19, sugirió a los jubilados que no han recibido finiquito no arriesgar su vida y buscar diálogo con las autoridades.