La propuesta de colocar pasto sintético a las canchas públicas, hecha por el candidato a gobernador Óscar Vega Marín, fue bien recibida por asociaciones que promueven el deporte, aunque tienen sus reservas.

“De resultar electo Gobernador, todas las canchas deportivas públicas del estado contarán con pasto sintético como parte de una política pública que dignifique las instalaciones deportivas en las que nuestros hijos practiquen deporte”. Esto lo prometió Vega Marín ante jóvenes en la colonia Mariano Matamoros, consigna un comunicado enviado por el candidato.

El presidente de la Asociación Unidos por el Futbol, Víctor Cortés, dijo a Gato x Liebre que el empastado protege la salud de los deportistas, y junto a la habilitación de espacios ayuda a combatir la inseguridad.

Pero en los últimos gobiernos del Partido Acción Nacional (PAN), agregó el también vicepresidente del Salón de la Fama del Deporte, nada de eso ocurrió.

“Si Vega Marín se pone las pilas, el deporte no ve colores, no ve siglas”, dijo el representante de la asociación que fomenta el deporte, difunde y reconoce a las personas que contribuyen a esto.

Rubén Díaz, como vicepresidente de la Asociación Estatal de Futbol de Baja California también cree que la propuesta es viable si se trata de invertir recursos públicos.

Explicó que el pasto sintético tiene más tiempo de vida que el natural en canchas que cada fin de semana reciben a miles de jugadores, pero pregunta quién va a cuidar los espacios rehabilitados.

“Hemos visto un chorro de unidades que el pasto les dura normalmente un año, año y medio, y ya no sirve para nada porque cometen el error de dárselo a cualquiera. No lo mantienen ellos”, dijo.

Y el mismo candidato no tiene muy claro todo lo relacionado con ese compromiso que asumió.

En entrevista, respondió que su equipo trabaja para conocer la cantidad de canchas en parques públicos y para estimar el presupuesto, porque algunas no están entregadas a las autoridades para recibir dinero público.

Dijo que la mayoría dependen de los municipios, y la estrategia general de su propuesta no solo incluye dinero público, sino también aliarse con empresas que colocarían su marca en el pasto.

“La sociedad puede multiplicar el presupuesto público. Tal vez hacemos una convocatoria para que las empresas sean las que hagan el empastado y nosotros pongamos tal vez los baños o mitad y mitad. Ya buscaremos el cómo, el cómo se resuelve”, respondió.