/ lunes 31 de mayo de 2021

¡Vamos a votar!

PRISMA

Amigo lector: Solo faltan algunas horas para que acudas a cumplir con tu obligación cívica de emitir tu voto en favor de los candidatos participantes en el proceso electoral, calificado como “atípico y el más grande de nuestra historia”, que supuestamente concluirá el 6 de junio próximo.

Te invitamos a que haciendo a un lado la modorra y el desaliento causado por el confinamiento a que nos condenaron y los problemas derivados del maldito Covid-19 que nos agobian -que parece tardará mucho tiempo en ser erradicado- salgas a votar.

Ya escuchaste las propuestas de quienes aspiran a la gubernatura, alcaldías, diputaciones locales y federales. Si no han sido bien explicadas como debió ser, por lo menos debes tener una idea de lo que prometen hacer si logran el triunfo. Debes estar consciente que la única forma de acabar con el abstencionismo electoral y promover el cambio que signifique mejores estadios de bienestar para nuestras familias y castigar a quienes han defraudado la confianza que les dimos en el pasado, es votar.

Recomendamos examinar el perfil de los candidatos, sus antecedentes, experiencias, conocimientos y capacidades y el desempeño que han tenido los que ocupan -u ocuparon cargos públicos-. Si realmente quieres el cambio que todos anhelamos, tu credencial de elector es el único instrumento que tienes para lograrlo. De nada servirán insultos, venganzas, odios y rencores y otras acciones al margen de la ley. ¡Solo tu voto!

A la hora de sufragar en favor de los candidatos a nuevos diputados considera que observamos caras nuevas que bien merecen ser votados. Sin embargo, analiza bien la personalidad de aquellos que quieren reelegirse, bien conocidos por cierto, que sin tener mérito alguno para ello solo aspiran a seguir cobrando sus fabulosas dietas, a espaldas de quienes los eligieron.

Por los partidos políticos ni te preocupes. Queda claro que a sus “dueños y directivos” solo les interesa proteger sus intereses personales y seguir vivos cobrando las prerrogativas millonarias que les entrega la autoridad electoral.

Así las cosas, amigo lector: Razona tu voto y acude a depositarlo en las urnas, en favor de quien consideres lo merece.

salgares4@gmail.com

PRISMA

Amigo lector: Solo faltan algunas horas para que acudas a cumplir con tu obligación cívica de emitir tu voto en favor de los candidatos participantes en el proceso electoral, calificado como “atípico y el más grande de nuestra historia”, que supuestamente concluirá el 6 de junio próximo.

Te invitamos a que haciendo a un lado la modorra y el desaliento causado por el confinamiento a que nos condenaron y los problemas derivados del maldito Covid-19 que nos agobian -que parece tardará mucho tiempo en ser erradicado- salgas a votar.

Ya escuchaste las propuestas de quienes aspiran a la gubernatura, alcaldías, diputaciones locales y federales. Si no han sido bien explicadas como debió ser, por lo menos debes tener una idea de lo que prometen hacer si logran el triunfo. Debes estar consciente que la única forma de acabar con el abstencionismo electoral y promover el cambio que signifique mejores estadios de bienestar para nuestras familias y castigar a quienes han defraudado la confianza que les dimos en el pasado, es votar.

Recomendamos examinar el perfil de los candidatos, sus antecedentes, experiencias, conocimientos y capacidades y el desempeño que han tenido los que ocupan -u ocuparon cargos públicos-. Si realmente quieres el cambio que todos anhelamos, tu credencial de elector es el único instrumento que tienes para lograrlo. De nada servirán insultos, venganzas, odios y rencores y otras acciones al margen de la ley. ¡Solo tu voto!

A la hora de sufragar en favor de los candidatos a nuevos diputados considera que observamos caras nuevas que bien merecen ser votados. Sin embargo, analiza bien la personalidad de aquellos que quieren reelegirse, bien conocidos por cierto, que sin tener mérito alguno para ello solo aspiran a seguir cobrando sus fabulosas dietas, a espaldas de quienes los eligieron.

Por los partidos políticos ni te preocupes. Queda claro que a sus “dueños y directivos” solo les interesa proteger sus intereses personales y seguir vivos cobrando las prerrogativas millonarias que les entrega la autoridad electoral.

Así las cosas, amigo lector: Razona tu voto y acude a depositarlo en las urnas, en favor de quien consideres lo merece.

salgares4@gmail.com