Uno de los regalos más significativos en el 14 de febrero son las flores, destacando las rosas rojas, que pueden ser desde una, hasta un arreglo de los llamados “buchones”, que pueden ser por arriba de 200 rosas, a las que se les puede agregar todo tipo de regalos, hasta dólares.
Marco Antonio Ramírez, encargado de la Florería La Violetera, con más de 50 años de existencia sobre la Calle México, expuso que junto con el Día de las Madres y de los Muertos, el 14 de febrero es una de las fechas más esperadas del año para los comerciantes del giro.
Si bien, la venta ya no es como antes, y el negocio se encuentra en la incertidumbre debido a los altos precios del producto, la festividad es buenas para ellos, y le da un respiro a sus finanzas, sin embargo, enfrentan una nueva amenaza que son las ventas por internet, pero afortunadamente para ellos, la gente se está dando cuenta que se tratan de fraudes y están regresando a las florerías.
Y es que las florerías tienen una gran cantidad de opciones hasta para el enamorado más humilde y con menos recursos, pero que no quiera dejar pasar por desapercibida esta fecha, ya que una sola rosa puede costar entre 35 y 45 pesos, pero se trata de flores frescas, y no como las que se venden en la calle o en las tiendas de autoservicio.
También tienen opciones como los arreglos sencillos o “bouquet”, conformado por diferentes clases de flores, con precios que van de los 300 pesos, hasta los 500, o bien, la clásica docena de rosas por 500 pesos.
Pero no solo los hombres regalan flores a sus amadas, ya que las muchachas también se las regalan a sus novios, como en el 14 de febrero del año pasado, que una chica le regaló un arreglo buchón a su novio, al que le colocaron cosas que a él le gustaban.
También hay amores eternos que se expresan con flores, es el caso de un cliente suyo con más de 80 años de edad, que acude al panteón a visitar a su esposa ya fallecida, le lleva flores los 14 de febrero, los cumpleaños y otras fechas especiales.
Hay otra persona que también visita cada domingo a su esposa ya fallecida, también le lleva un ramo de rosas.