Datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) indican que la población con rezago educativo, al cierre del 2022, incrementó, de tal manera en que 592 mil personas están en dicha condición.
El concepto de rezago educativo del Coneval se consolida cuando no se cumple con la normativa de garantizar la escolarización en las edades típicas para asistir a los niveles educativos obligatorios vigentes.
En contraste, en el 2016, 509 mil 400 personas sufrían un rezago educativo, lo que significa que incrementó en un 16 por ciento.
Estimaciones del Banco Mundial atribuyeron que la pandemia causó en México un rezago educativo. Previo a la pandemia, en promedio, en Baja California, las personas tenían un nivel educativo de 10.2 años de escolaridad, lo que disminuyó a 8.2 años.
Lo anterior, además genera que en Baja California los pocos que están capacitados, no tienen empleo.
Los bajacalifornianos con mayor nivel de estudios son quienes menos encuentran empleo. Representan el 51.% de los desempleados, lo que es también un reflejo del tipo de empresas que tiene el estado, enfocadas en mano de obra no calificada.
Un análisis del Centro de Estudios de Baja California (CEEBC) documenta que quienes tienen educación media y superior, es decir la preparatoria terminada o una licenciatura, son el 51.1% de los desempleados en la entidad.
Por lo anterior, el consejero presidente de Coalición para la Participación Social en la Educación (Copase), considera que es necesario un golpe de timón en el rumbo de la educación en Baja California, Alfredo Postlethwaite Duhagón.
“La realidad es que el Sistema Educativo Estatal de Baja California se encuentra ante una emergencia generacional causada por el atraso acumulado en el nivel de aprendizaje, la desmotivación de los alumnos y la deserción escolar. Más de 29 mil alumnos en el nivel preparatoria abandonan (pérdida acumulada) cada año sus estudios. Esto es, el 40% de los estudiantes de preparatoria acaban condenados al trabajo informal o poco remunerador, a la desigualdad de oportunidades y en casos extremos, a la delincuencia”.
De continuar con los indicadores, solo 2 de cada 10 estudiantes que ingresan a este nivel egresan con los conocimientos que debieron adquirir para seguir estudiando. Esto es un rendimiento neto efectivo, de solo 24 %.