MÁS ACCIÓN…
Quien debería de comenzar a demostrar con acciones y no con palabras, es el director ARMANDO SAMANIEGO de la Comisión Estatal de Servicios Públicos quien está más preocupado por lo que pasa en Morena y la política, que en atender los trabajos de pluviales, alcantarillado y servicio del agua. En su página de facebook comentó que estaba de acuerdo con la jefa de la CDMX, CLAUDIA SHEINBAUM quien está elaborando con recursos públicos una gigante cabeza de TLALI que será de más de seis metros de altura y que es de seguro una prioridad para la reactivación económica en su ciudad tras el paso de la pandemia. Pues el director cachanilla de la CESPM se le ocurrió retomar tan flamante propuesta pero cambiando el nombre de la Avenida COLÓN por avenida TLALI, argumentando que sería un reconocimiento a los 500 años de resistencia a las mujeres indígenas del país y que para él, eso representaría un paso a “descolonizarnos”. Se le volvió a “subir” el post en un momento que la CESPM ha demostrado fallas, donde hay un DREN 134 con colapsos, poniendo en riesgo de colapso a zonas en un radio de 2 kilómetros, donde los pluviales se encuentran en zonas llenos de basura, falta de alcantarillado en periferias de la ciudad. Con un Fisamex realizando cobros ilegales y que el sector empresarial y de comercio así lo han señalado, con lo que ha conseguido la CESPM múltiples demandas de amparo, carteras vencidas y por supuesto poca obra. Al joven SAMANIEGO DE BONILLA se le olvida de las acciones dicen más que mil palabras.
¿MILITARIZACIÓN?
El que se haya eliminado el Fortaseg, que es un subsidio para el fortalecimiento a la seguridad pública que se les brindaba a los municipios, es algo muy grave. El gobierno federal no contempla el recurso para el 2022, tal y como tampoco lo contempló en el 2021. Y uno de los resultados que estamos viendo es la falta de equipamiento a la Dirección de Seguridad Pública Municipal (DSPM), tales como patrullas. En esta casa editorial nos dimos cuenta de la falla de la radiofrecuencia policiaca cuando un reportero de casa fue amenazado y asaltado por unos fulanos que se encontraban en el parque Héroes de Chapultepec, y le fue imposible comunicarse al 911, por lo que al entrevistarse con un policía, este le dijo lo que estaba pasando, simplemente no servía la radiofrecuencia. Sin embargo, al superdelegado del gobierno federal, JESÚS ALEJANDRO RUIZ URIBE, esto no le preocupa en lo más mínimo, ya que llegarán refuerzos de la Guardia Nacional (GN). Por si no los conoce, son uno tipos que patrullan las calles, fuertemente armados, vestidos con un camuflaje de patrón digital, de colores blanco, gris y negro. De ahí en fuera no les conocemos alguna acción sobresaliente en el Estado, solo nos enteramos de ellos cuando golpean a migrantes, o de que les dan paso libre a los criminales, y eso no lo inventamos, se encuentran videos de ello en las redes sociales. El superdelegado dice que los elementos de la GN o la guardia amloísta, tiene facultades plenas en materia policiaca, que se las otorga la constitución, es decir, pueden hasta aplicar multas de tránsito, solo que sus facultades las están desarrollando paulatinamente. Hay que recordar que el presidente ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR, anunció que la GN pasará a formar parte del Ejército, con el fin de que no se corrompa. Es decir, si somos muy malpensados, que sí lo somos, entonces estamos hablando de que deliberadamente se está dejando a la deriva a las policías municipales, ya que la federación no les financiará el equipamiento, ni la capacitación, con el fin de que la GN absorba estas funciones. Esto debido a que las policías municipales siempre han sido vilipendiadas, con que son las más propensas a la corrupción, y el eslabón más débil en la cadena de la seguridad pública, sin que nadie en la federación haya mencionado en lo más mínimo, en mejorar sus condiciones laborales, sus prestaciones, seguridad social, ni nada por el estilo. Es por ello que ya podemos deducir que la militarización del país, va en curso, y si no lo es, pues hace como pato. Es así que la política de abrazos, no balazos se aplicará en todo el territorio bajacaliforniano, y que a casi 3 años de la administración federal, nomás no ha dado resultados. Al final, vendrán unos fuereños a cuidarnos, fuereños que recibirán órdenes a 3 mil kilómetros de distancia, sin ningún arraigo, con desconocimiento del terreno, de la gente, ni de las costumbres, y que de un día para otro, puede ser llamado a otro punto del país. Entonces, ¿la militarización viene?
