/ domingo 18 de octubre de 2020

Cincuentenario de Mexicali

La Espiga


Del 15 al 23 de noviembre de 1952 se llevó a cabo la Feria Comercial, Industrial y Agrícola del Cincuentenario de Mexicali. La reina de las fiestas por el 50 aniversario cachanilla fue la bella María Cristina Durazo, nativa mexicalense, quien fue coronada en el Cinema Curto por el gobernador del Territorio Norte de Baja California, Alfonso García González.

El periodista Armando Ives Lelevier obtuvo la presea de los “Juegos Florales del Cincuentenario” en la rama de Historia; la “Flor Natural” la obtuvo la poetisa Aurora Reyes con su composición “Estancias en el Desierto”. El gran orador don Manuel Herrera y Lasso hizo estremecer a la audiencia en el Cinema Curto; la soprano Estela Millán, formada en Milán, Italia, emocionó a los mexicalenses con su delicado canto.

Los periódicos de Mexicali ABC, La Extra y Nuevo Mundo publicaron ediciones especiales con los diversos eventos conmemorativos. Se organizaron además desfiles militares y escolares con la participación entusiasta de sindicatos y grupos deportivos. Hubo carreras de caballos, saraos, bailes, corridas de toros con grandes figuras internacionales. La Plaza de Toros de Mexicali se vistió con sus mejores galas; su acceso por la Av. Pino Suárez de la colonia Nueva estuvo atiborrado de gente. El desfile de la Revolución Mexicana fue de lujo, estuvieron los gobernadores de Sonora, BCS, Arizona y California.

En los parques deportivos Necaxa e Hidalgo se montó la Exhibición Comercial e Industrial con la presencia de firmas prestigiadas. Desde autos último modelo hasta tractores, muebles y enseres domésticos de las mueblerías “El Campesino” y “Monterrey”. Empresas cerveceras locales como La Peninsular, De Anza y Mexicali, Algodoneras: La Jabonera Industrial del Pacífico, Globe Mills y la Compresora de Mexicali, Pesqueras y Vinateras trajeron muestras de sus productos.

Todo Mexicali vibró en serio con el Ballet de Bellas Artes de México, el folclor y la música autóctona hicieron presencia; los hoteles locales resultaron insuficientes para atender a los visitantes.

El coronel Esteban Cantú ofreció una apasionada conferencia sobre su llegada a Mexicali y los disturbios de 1911. La Cámara de Comercio, auxiliada por don José Ulloa González, lució en grande su poder de convocatoria. A propuesta de don José Castañedo, el 6 de enero de 1898 fue tomada como fecha fundacional para darle sustento a las Fiestas del Cincuentenario de Mexicali (1952).

Entre agosto y octubre de 1968 Mexicali obtuvo su fecha fundacional definitiva: 14 de marzo de 1903. Por lo tanto, las referidas Fiestas del Cincuentenario quedaron en la opacidad, pero en la memoria afectiva de viejos residentes todavía permanecen los recuerdos de aquel magno acontecimiento.

Todavía perdura la memoria de la Virgen Conquistadora de las Californias, Nuestra Señora de Loreto, introducida a Baja California por los misioneros jesuitas Eusebio Francisco Kino y Juan María de Salvatierra. La llamada “Virgen Madre de las Californias” fue traída directamente de la misión de Loreto, B.C.S., en una avioneta propiedad de don Mario Hernández Maytorena. En ese año los católicos mexicalenses le rindieron tributo a la Madre y Patrona de las Californias.


La Espiga


Del 15 al 23 de noviembre de 1952 se llevó a cabo la Feria Comercial, Industrial y Agrícola del Cincuentenario de Mexicali. La reina de las fiestas por el 50 aniversario cachanilla fue la bella María Cristina Durazo, nativa mexicalense, quien fue coronada en el Cinema Curto por el gobernador del Territorio Norte de Baja California, Alfonso García González.

El periodista Armando Ives Lelevier obtuvo la presea de los “Juegos Florales del Cincuentenario” en la rama de Historia; la “Flor Natural” la obtuvo la poetisa Aurora Reyes con su composición “Estancias en el Desierto”. El gran orador don Manuel Herrera y Lasso hizo estremecer a la audiencia en el Cinema Curto; la soprano Estela Millán, formada en Milán, Italia, emocionó a los mexicalenses con su delicado canto.

Los periódicos de Mexicali ABC, La Extra y Nuevo Mundo publicaron ediciones especiales con los diversos eventos conmemorativos. Se organizaron además desfiles militares y escolares con la participación entusiasta de sindicatos y grupos deportivos. Hubo carreras de caballos, saraos, bailes, corridas de toros con grandes figuras internacionales. La Plaza de Toros de Mexicali se vistió con sus mejores galas; su acceso por la Av. Pino Suárez de la colonia Nueva estuvo atiborrado de gente. El desfile de la Revolución Mexicana fue de lujo, estuvieron los gobernadores de Sonora, BCS, Arizona y California.

En los parques deportivos Necaxa e Hidalgo se montó la Exhibición Comercial e Industrial con la presencia de firmas prestigiadas. Desde autos último modelo hasta tractores, muebles y enseres domésticos de las mueblerías “El Campesino” y “Monterrey”. Empresas cerveceras locales como La Peninsular, De Anza y Mexicali, Algodoneras: La Jabonera Industrial del Pacífico, Globe Mills y la Compresora de Mexicali, Pesqueras y Vinateras trajeron muestras de sus productos.

Todo Mexicali vibró en serio con el Ballet de Bellas Artes de México, el folclor y la música autóctona hicieron presencia; los hoteles locales resultaron insuficientes para atender a los visitantes.

El coronel Esteban Cantú ofreció una apasionada conferencia sobre su llegada a Mexicali y los disturbios de 1911. La Cámara de Comercio, auxiliada por don José Ulloa González, lució en grande su poder de convocatoria. A propuesta de don José Castañedo, el 6 de enero de 1898 fue tomada como fecha fundacional para darle sustento a las Fiestas del Cincuentenario de Mexicali (1952).

Entre agosto y octubre de 1968 Mexicali obtuvo su fecha fundacional definitiva: 14 de marzo de 1903. Por lo tanto, las referidas Fiestas del Cincuentenario quedaron en la opacidad, pero en la memoria afectiva de viejos residentes todavía permanecen los recuerdos de aquel magno acontecimiento.

Todavía perdura la memoria de la Virgen Conquistadora de las Californias, Nuestra Señora de Loreto, introducida a Baja California por los misioneros jesuitas Eusebio Francisco Kino y Juan María de Salvatierra. La llamada “Virgen Madre de las Californias” fue traída directamente de la misión de Loreto, B.C.S., en una avioneta propiedad de don Mario Hernández Maytorena. En ese año los católicos mexicalenses le rindieron tributo a la Madre y Patrona de las Californias.