Quo Vadis
Ya sabíamos los adictos a leer noticias de la tramposa forma que desde hace tiempo algunos delincuentes se avientan a automotores en marcha para ser atropellados, sufrir algunas lesiones y con ello tratar de extorsionar al malogrado conductor (a)…
Se les llama a estos “nuevos” delincuentes como “superman”…
Un video reciente y muy bien logrado en la CDMX refleja el “modus operandi” de esta actividad ilícita ( https://plumasatomicas.com/noticias/cdmx/superman-extorsion-cdmx/ ) que no es nueva, insisto, pero por ello hay que estar más que alerta cuando se conduce sobretodo en zonas habitacionales que parecen ser las preferidas por estos perversos que utilizan las 24 horas del día para imaginar cómo hacer víctimas a inocentes.
Pero eso no es todo, imagínese que algún conductor (a) que caiga en esa trampa se niegue a pagar la extorsión que pretende el “atropellado” y decida llamar a las autoridades para que se deslinden responsabilidades y con ello caer, invariablemente, en un escenario legal que podría convertirse en un auténtico viacrucis…
Esto porque hablando del primer respondiente en un caso de éstos como el “atropellamiento”, seguramente la Policía Municipal ante la falta de testigos o videograbaciones a favor del conductor (a) haga una recopilación de “hechos”, la entregue a ministeriales (que a veces nada investigan) y éstos a un fiscal que por omisión o acción determine presunta culpabilidad y conduzca al conductor (a) ante un juez con el ánimo de que pague curaciones… o hasta indemnización al mentado “superman”…
Por eso y tan solo por eso, creo conveniente que los operadores del Sistema Adversarial deben o tienen la obligación de emitir recomendaciones a los ciudadanos en general que utilizan automotores y una clara advertencia preventiva a este tipo de delincuentes en el sentido de que para las autoridades no será sencillo que baste la palabra del “atropellado” contra el conductor (a) para tratar de recibir beneficios económicos.
Mire usted, en el retorcido mundo que vivimos la delincuencia inventa incuantificables formas para vivir de lo ilícito, las más de las veces incurriendo con todas las agravantes y cuidando salir airosos gracias a las insolentes prerrogativas que otorga el Sistema Adversarial a la delincuencia sin subestimar, por supuesto, las alternativas de defensa para las víctimas reales…
Pero en mi caso me apena tener que aceptar que en años anteriores he sido víctima de delitos que afectaron bienes sin ver en algún caso un mínimo de alcance de la aplicación de la ley y la justicia, al contrario, ser testigo de omisiones y acciones que opacaron la imagen “corporativa” de la Policía Municipal y Ministerial por servidores públicos que no quisieron, no pudieron o no supieron conducirse con pulcritud y voluntad de servicio dejándolo a uno en total indefensión.
Por eso, cuidado con los nuevos “superman”, no vaya a ser que vengan acompañados de un “robin” vestido de policía o fiscal… concediendo el beneficio de la duda. ¿o no?
