Cuauhtémoc López Guzmán
En septiembre de 2015, sensibilizado por el sufrimiento de los perros callejeros, inicié una campaña en el sitio www.change.org en favor de políticas locales que protegieran y salvaran a los perritos callejeros y se evitara el maltrato a los que tienen un hogar.
Recibí 1,131 firmas de apoyo de distintas naciones. Animado por este respaldo mundial, en enero de 2016 entregué el paquete de firmas al entonces alcalde Jaime Rafael Díaz Ochoa. Como coincidió que era un Miércoles Ciudadano, le entregué directamente la petición al alcalde y con ello el interés de un reportero de la prensa (La Voz de la Frontera) me permitió difundir mis propuestas. Unos días después recibí respuesta del Centro de Control Animal y sus consideraciones eran muy limitadas respecto a las políticas públicas que yo había planteado.
Aunque con cuatro meses de diferencia (lunes 16 de mayo de 2016) La voz de la Frontera difundió mis peticiones en la primera sección en la página final a tamaño completo. Al darme cuenta que no logré ningún cambio, en el 2019 continué con esta iniciativa, esta vez respaldado en la Ley de Participación Ciudadana que contempla la figura de iniciativa ciudadana como una modalidad de la democracia directa. Realicé así una propuesta de reforma a la Ley de Protección a los Animales Domésticos del Estado de Baja California y al Reglamento para el Control de los Animales Domésticos del Municipio de Mexicali.
Requería 500 firmas de apoyo ciudadano para presentarla como iniciativa de ley ciudadana al Congreso del Estado. Desafortunadamente el inicio de la pandemia en marzo de 2020 retrasó la recolección de firmas. Logré el apoyo de 586 firmas y entregué la Iniciativa de Ley Ciudadana el 23 de febrero de 2023 a la que le llamé “Jack y Scooby Doo” en memoria a mis dos perritos fallecidos. Aproveché también la oportunidad para participar en el parlamento abierto que convocó la diputada Daylin García Ruvalcaba.
Las propuestas de mi iniciativa son las siguientes:
1. Crear un hospital -refugio.
2. Dotar al hospital -refugio de patrullas caninas que circule por la ciudad para sancionar el maltrato animal. En este caso los conductores serían agentes policiales.
3. Evitar el sacrificio de los perritos (salvo que sea inevitable por la gravedad de su enfermedad o evitar su sufrimiento). De acuerdo a datos oficiales se sacrifican 3,500 perros callejeros al año en Mexicali.
4. Ambulancias caninas en vez de perreras y
5. Organizar un control y registro de mascotas obligatorio con un chip que contenga la información de los propietarios para localizarlos de inmediato en caso de que se escapen o pierdan.
Desde entonces he enviado tres oficios al Congreso del Estado para saber si fue aceptada, analizada y aceptada mi iniciativa de ley. No he recibido respuesta, ahora con la efervescencia de las campañas políticas estos temas creo no son de interés legislativo.
Al menos me da gusto que la gobernadora Marina del Pilar haya impulsado la creación del santuario Mily como refugio y lugar de adopción. Esto me anima a seguir fomentando la cultura y creación de políticas públicas en favor de las mascotas.
