María de los Ángeles Huerta del Río
Un aspecto muy importante en la construcción del segundo piso de la Cuarta Transformación será la eficacia de las personas responsables de profundizar los cambios que ya se han iniciado con el presidente López Obrador a la cabeza.
Es claro para casi todos que las erráticas decisiones de Claudio X y los líderes del PRI y del PAN tienen hoy a la oposición y su candidata Xóchitl Gálvez a más de 20 puntos por debajo de la doctora Claudia Sheinbaum. En la política, como en muchas otras áreas de la acción humana, las personas y los equipos son fundamentales para lograr los objetivos deseados.
En esta semana, la candidata morenista ha presentado a los primeros personajes que van a acompañarla en este proceso hacia la Presidencia de nuestro país. El frente opositor también ha barajado varios nombres de aliados prestos a trabajar para la próxima contienda electoral.
El primer nombre que destaca de parte de la coalición que encabeza Sheinbaum, es el de Mario Delgado. El exitoso dirigente partidista es ahora el responsable de la campaña presidencial morenista. Mario tiene en su haber más de 20 triunfos en estados hoy gobernados por Morena y ha demostrado que puede orquestar una muy confiable y ganadora estrategia electoral.
Hace pocos días, Xóchitl integró a su equipo a Max Cortázar, a quien se le recuerda como vocero y encargado de la comunicación durante la campaña y el sexenio de Felipe Calderón. El señor Cortázar carga, entre otras cosas, con la mancha y acusación de participar en el fraude electoral del 2006. Además, una parte de la prensa mexicana lo ha recordado también como un activo ejecutor de prácticas de censura y acoso a medios de comunicación. Frente a este inefable perfil, se presenta la figura de Tatiana Clouthier, quien hoy aparece como la actual coordinadora de las vocerías en favor de Claudia Sheinbaum.
También llama la atención el carisma y el compromiso indubitable del diputado federal Gerardo Fernández Noroña, quien además de acompañar a la candidata de Morena en todas sus giras y de haber sido calificado como el favorito presidencial de más del 10% de la población, enseñorea a la candidata y se presenta como un muy visible personaje que en nada podría ser opacado por adversarios como Armando Tejeda o Carlos Mandujano, a quienes Xóchitl presenta como personajes protagónicos muy cercanos de su fallida campaña electoral.
Para realmente ganar, no hay duda de que los equipos y personajes que acompañan a l@s candidat@s puede ser el factor diferencial. Hasta ahora es claro hacia dónde se inclina la balanza.
Por si la desventaja fuera poca para el frente opositor, no parece ser de mucha ayuda incluir en sus filas a personajes como Manlio Fabio Beltrones o Vicente Fox Quezada, si el objetivo fuera el de ganar una contienda limpiamente. En todo caso, está por verse si los cambios en el INE impedirán con efectividad que se repita una vez más el peligro de un fraude electoral.
