/ viernes 22 de febrero de 2019

Tutti frutti sabatini

Vientos


El verbo politizar me suena a un invento idiomático para peyorizar cualquier actividad normal a la que le queremos poner un adjetivo denostativo para convencer a otros en que tales acciones son deleznables.

Ni siquiera pidoperdón a los politólogos de título, porque todas las actividades del ser humano–cuando menos en México- son políticas… así nos encontramos con políticaseconómicas, sociales, educativas y un etcétera formidable que responden a unmandato meramente constitucional: Constitución POLÍTICA de los Estados UnidosMexicanos… así pues, todo es politizado… hasta la posible militarización de laGuardia Nacional para responder a las políticas de seguridad social… y vámonosa otro renglón de política: la de Relaciones Exteriores que ordena a losgobiernos mexicanos no meter al país mexicano en los asuntos internos de otrospaíses, lo que exigimos para nosotros… Por eso la postura de López Obrador comopresidente de México, de no meterse en el caso de Venezuela en forma directa,como lo están haciendo otros países hermanos cuyos gobiernos tendrán algúnmotivo para uncirse a la política estadunidense de meterse en otros países sinrazón alguna y tomar determinaciones soberanas… ¿Alguien ya se olvidó del casode Chile y sus intereses empresariales?... Y antes, ¿ya se les olvidó lo dePanamá? y todos los etcéteras que podemos enlistar sin pujar mucho… Y bien queasí no sea… Y ahora con esa cosa juguetona que se llama democracia: ¿No esseñores académicos, el gobierno del pueblo, por el pueblo y para el pueblo?...Pues si el pueblo es soberano, por qué no puede haber un presidente con,digamos como excepción, un Congreso al 100% de representantes si fueronelegidos por los ciudadanos?... ¿Por qué esa disposición de un por ciento comomáximo?... ¿No es traición al principio de la democracia en donde el pueblo essoberano?... Y he aquí en donde la famosa teoría democrática falla… se puedellegar a esa vía dictatorial democráticamente… cuando menos lo veo así… Que poreso los ajustes programáticos, es un retoque que deforma el criterio filosóficode la democracia… así que mientras usted manosea estas palabras, yo me voy a labotana sabatina que hoy es un lechón muerto rostizado chorreante de su grasitay luego… pos a taquearlo con las de mais del comal a la vodka… y como hace unduro cierzo invernal, pues los valientes caguameros al ataque… pero es fecha yficha de los tequilines o güisquis o coñaques u lo que seya… para el trasiego,no para ponerse hasta‘trás… y me largo antes de que el gaviotero comandado porSaúl Rosas ataque por la retaguardia… como el viejo chiste aquel del chino quevolvió de un viaje de Dinamarca a Pekín y le preguntaron cómo le fue… yrespondió: “¡Oh, mu’bonito!... mucha luz, todo bonito… pero en el sexo, ¡újule!,mila: mujé con mujé… homble con homble… ¡Uta’male como lele!... y me largo…arrivedercci…

Vientos


El verbo politizar me suena a un invento idiomático para peyorizar cualquier actividad normal a la que le queremos poner un adjetivo denostativo para convencer a otros en que tales acciones son deleznables.

Ni siquiera pidoperdón a los politólogos de título, porque todas las actividades del ser humano–cuando menos en México- son políticas… así nos encontramos con políticaseconómicas, sociales, educativas y un etcétera formidable que responden a unmandato meramente constitucional: Constitución POLÍTICA de los Estados UnidosMexicanos… así pues, todo es politizado… hasta la posible militarización de laGuardia Nacional para responder a las políticas de seguridad social… y vámonosa otro renglón de política: la de Relaciones Exteriores que ordena a losgobiernos mexicanos no meter al país mexicano en los asuntos internos de otrospaíses, lo que exigimos para nosotros… Por eso la postura de López Obrador comopresidente de México, de no meterse en el caso de Venezuela en forma directa,como lo están haciendo otros países hermanos cuyos gobiernos tendrán algúnmotivo para uncirse a la política estadunidense de meterse en otros países sinrazón alguna y tomar determinaciones soberanas… ¿Alguien ya se olvidó del casode Chile y sus intereses empresariales?... Y antes, ¿ya se les olvidó lo dePanamá? y todos los etcéteras que podemos enlistar sin pujar mucho… Y bien queasí no sea… Y ahora con esa cosa juguetona que se llama democracia: ¿No esseñores académicos, el gobierno del pueblo, por el pueblo y para el pueblo?...Pues si el pueblo es soberano, por qué no puede haber un presidente con,digamos como excepción, un Congreso al 100% de representantes si fueronelegidos por los ciudadanos?... ¿Por qué esa disposición de un por ciento comomáximo?... ¿No es traición al principio de la democracia en donde el pueblo essoberano?... Y he aquí en donde la famosa teoría democrática falla… se puedellegar a esa vía dictatorial democráticamente… cuando menos lo veo así… Que poreso los ajustes programáticos, es un retoque que deforma el criterio filosóficode la democracia… así que mientras usted manosea estas palabras, yo me voy a labotana sabatina que hoy es un lechón muerto rostizado chorreante de su grasitay luego… pos a taquearlo con las de mais del comal a la vodka… y como hace unduro cierzo invernal, pues los valientes caguameros al ataque… pero es fecha yficha de los tequilines o güisquis o coñaques u lo que seya… para el trasiego,no para ponerse hasta‘trás… y me largo antes de que el gaviotero comandado porSaúl Rosas ataque por la retaguardia… como el viejo chiste aquel del chino quevolvió de un viaje de Dinamarca a Pekín y le preguntaron cómo le fue… yrespondió: “¡Oh, mu’bonito!... mucha luz, todo bonito… pero en el sexo, ¡újule!,mila: mujé con mujé… homble con homble… ¡Uta’male como lele!... y me largo…arrivedercci…